“Han aparecido otras microalgas que están generando blooms en la costa expuesta de Chiloé”

Desde el 2006 han existido varios eventos de Floraciones Algales Nocivas (FAN), en los cuales se han descrito efectos nocivos en los peces causados por la microalga Alexandrium Catenella, pero no se habían observado mortalidades masivas sino hasta el 2009.

“Estos efectos están siendo cada vez más intensos, pues las FAN se están presentando de manera más intensa. Los peces de cultivo se están viendo afectados, pues al estar en cautiverio claramente no pueden arrancar a aguas que estén libres de microalgas. Ahora bien, es totalmente normal que A. catenella genere complejidades en peces. El problema es que la vía con que se ven afectados los mariscos, por acumulación de toxina, no es la misma para afectar a los peces”, comentó a Salmonexpert el Dr. Jorge Mardones, investigador del Centro de Estudios de Algas Nocivas (Crean) del Ifop.

Según explicó el profesional, los peces no se ven afectados por el Veneno Paralizante de los Mariscos (VPM). “De hecho, la forma de excreción del VPM es bastante rápida y no se acumula en la carne o el tejido de los peces. A. catenella tiene otro mecanismo de acción en peces, y es algo que se ha estado estudiando los últimos 5 años, porque no se tenía registro del por qué afectaba a los peces. Básicamente, el efecto directo es a las branquias, pues las toxinas rompen el tejido y por ende el pez no puede respirar. En el 2016 publicamos el artículo ‘Avances en el estudio de ictiotoxinas asociadas con Floraciones Algales Nocivas (FANs)’, en el cual se describe el efecto de FAN en los peces, el porqué de estos fenómenos y en qué etapa se encuentra el estudio. Esto, porque la investigación relacionada con esto es muy incipiente”, manifestó el Dr. Mardones.

Nuevas especies

A juicio del investigador, las evidencias y los monitoreos, están demostrando que las FANs se están volviendo más intensas y a la vez su cobertura se está incrementando según datos reales.

“Si en el futuro seguirá aumentando su intensidad, eso no se puede asegurar, pero sí pareciera haber una relación directa con la temperatura. Esto, porque existen diversas investigaciones que demuestran que cuando hay anomalías positivas en la temperatura, es decir, que la temperatura es más cálida de los normal comparada con el mismo periodo de años anteriores, cada vez que ocurre esto, aparecen eventos FAN mucho más intensos”, argumentó el profesional.

Según explica el Dr. Mardones, en base a su conocimiento, cada vez que están sucediendo estos fenómenos FAN, están apareciendo nuevas especies de microalgas que están floreciendo.

“Por ejemplo, Pseudochattonella verruculosa, que generó la gran mortalidad de salmones el 2016, probablemente no se detectaba, porque los sistemas de monitoreo no están enfocados a detectarla. Y como esto es causa- consecuencia, y la microalga mató salmones, se comenzó a investigar un poco más lo que había en la columna de agua y se detectó que estaba ahí. En cambio, A. catenella es una especie que se ha analizado por muchos años debido al VPM que afecta la salud humana. Ahora están apareciendo otras especies de microalgas que están generando bloom en la costa expuesta, pero que están siendo detectadas pues los programas están siendo mas acuciosos para detectar microalgas que puedan generar nocividad en peces”, recalcó el investigador.

El profesional puntualizó que se están detectando FAN en zonas oceánicas, pero aun no está claro si anteriormente estas floraciones se encontraban ahí.

“Personalmente, considero que históricamente no se han desarrollado las líneas bases para determinar cuales son los lugares aptos para realizar acuicultura en el sur de Chile. Ahora bien, si la industria salmonicultora se trasladara a zonas más expuestas, aliviaría los mares interiores ya que la liberación de nutrientes sería menor. Pero pensar que por trasladarse a zonas expuestas, se verían libres de FAN, esto debería determinarse con una estudio de largo plazo para observar que no se manifiesten FAN intensas, como está ocurriendo con A. catenella y Karenia. Lo que dice el satélite cuando se miden concentraciones de clorofila, es que estas son muy intensas en la costa expuesta de Chiloé, pero no se sabe si esta clorofila pertenece a microalgas tóxicas”, argumentó el Dr. Jorge Mardones.