“Para abrirse a la Bolsa de Oslo, primero las salmonicultoras deben comportarse correctamente”
Chile: En entrevista con Salmonexpert, el vicepresidente de Compañía Pesquera Camanchaca, Francisco Cifuentes, llamó a la industria acuícola nacional a hacer las cosas bien con el fin de calificar para ingresar al mercado de capitales noruego, el principal del mundo en seafood.
Con una recaudación de US$ 108 millones se concretó el proceso de apertura en Bolsa de Salmones Camanchaca, mediante la colocación de 19.800.000 acciones en la plaza de Comercio de Santiago, 83% de las cuales fueron a manos de inversores extranjeros quienes iniciarán transacciones en el mercado de capitales de Oslo como certificados representativos de las acciones.
El precio de corte fue de $3.268 por acción o 42 NOK con una demanda superior a 8 veces el total de títulos puestos a ese precio. Con ello, Salmones Camanchaca y su matriz colocaron el 30% de los papeles en nuevos inversionistas extranjeros y locales de variados segmentos.
En entrevista con Salmonexpert, Francisco Cifuentes, vicepresidente de Compañía Pesquera Camanchaca, destacó que esta exitosa operación, que les permitirá llevar adelante sus planes de crecimiento orgánico, dejó a la empresa como la primera y única latinoamericana en cotizar en el principal mercado de seafood del mundo, que es el noruego.
Ustedes son vistos como un modelo ante sus pares para abrirse a Bolsa de Oslo. ¿Qué deben hacer las salmonicultoras chilenas para calificar y entrar al mercado de capitales noruego?
Primero, comportarse correctamente. Y aquí no hay que pedir perdón, sino que hacer las cosas bien a nivel sanitario, laboral, tributario, de relaciones con la comunidad, con los vecinos, con el Gobierno. Ya no es indiferente la cantidad de gente que está vinculada por distintos motivos con la actividad de la salmonicultura. Se deben identificar los grupos e incorporarlos en los planes para que estén informados de lo que efectuamos, hacia dónde vamos, y por qué. A las personas les gusta la transparencia y las prácticas positivas.
También deben colocar directores competentes. No se puede poner a la familia ahí, necesariamente se tiene que incorporar gente que aporte diferentes visiones, incluso con críticas si algo no le parece bien en la marcha de la empresa. Hoy existen set con nuevos estándares mundiales de gobierno corporativo que se están aplicando y estamos atentos a materializar lo mismo en Chile.
¿No todas las empresas del sector hacen las cosas bien, entonces?
No sé si lo hacen bien o mal, pero las compañías deben empezar a regirse por un marco moderno y concretar un cambio cultural al interior de la empresa. Irá sucediendo, creo yo, naturalmente.
Hoy los mercados mundiales exigen más transparencia.
Claro. Si ocurre algo, quieren saberlo. No les gusta que las compañías tapen cierta información y tener que enfrentarse a sorpresas, ya sean buenas o malas.
¿Por qué las salmonicultoras noruegas están mejor valorizadas que las chilenas?
El riesgo general de Sudamérica de alguna manera influye, aunque Chile sea un país de avanzada en la industria. Además, el mercado europeo es mejor que el resto, es un hecho, son gente que se alimenta de salmón desde hace 1.000 años. Así como los norteamericanos comen carne, en el viejo continente consumen mucho pescado, valoran bastante los productos marinos. Es una fuente de suministro para el presente y el futuro, en su caso.
Es un desafío pendiente, por tanto, posicionar de mejor manera al salmón nacional en Chile para aumentar su consumo local, y no enfocarse solamente en los mercados internacionales.
Sí, aunque la escasez de pescado que hoy predomina en la costa hace que los mismos restoranes pongan en sus cartas como menú del día al salmón. Ya que es un producto disponible, a diferencia de por ejemplo la reineta que puede encontrarse en veda.
¿Piensa, como muchos, que viene una nueva consolidación a la industria chilena? Friosur anunció la venta de su división salmonicultora.
Siempre hay consolidación pues, por mil razones, hay inversionistas que prefieren trasladarse a otros mercados u orientar sus desembolsos hacia sectores distintos. Lo que sí, nosotros no vemos que la regulación -como se ha dicho- esté empujando necesariamente a eso.
Es que no se puede tener un tamaño muy pequeño para mantener el abastecimiento parejo durante el año. Se debe contar con varios centros en producción para cubrir los espacios vacíos que quedarían si solamente se operara con una o dos concesiones. Para que las cadenas de suministro sean fuertes, se necesita una magnitud mediana o grande de empresa.
Por ejemplo, nosotros podemos vender a una cadena de retail estadounidense salmón para octubre, noviembre y diciembre y firmarlo hoy mismo, porque ya tenemos producto para eso, los peces están en el agua. En cambio, una compañía pequeña cuenta solamente en ciertas épocas del año con volúmenes grandes y en otras, quizás no posee nada para ofrecer.
¿Salmones Camanchaca pretende ser parte de algún proceso de fusión o adquisición?
No, porque tenemos el tamaño adecuado y no entregaríamos el control de nuestra compañía. Cualquier consolidación estaría basada en que nos mantuviéramos como dueños de la empresa. Llevamos muchos años operando como para no respetar eso, no está en nuestros planes.