Gobierno alerta que 27 agrupaciones de concesiones concentran 75% de la producción
Chile: En entrevista con Salmonexpert, el jefe de la división de Acuicultura de Subpesca, Eugenio Zamorano, asegura que el reglamento sanitario no priva del derecho a hacer mejor uso de los centros mediante la rotación, que a su juicio en Chile no existe.
El año pasado, se cambió el Reglamento Sanitario. Previamente, las concesiones que estaban dentro de un barrio y que no se utilizaban, se permitía ingresarlas al Programa de Manejo, lo que se contabilizaba como operación. Eso se modificó y ahora solamente se deja un ciclo para que el centro descanse y en el siguiente, tiene que trabajar.
Buena parte de los salmonicultores acusan que esto provocaría una expansión descontrolada de la producción, siendo contrario a lo que establece la autoridad, que por un lado restringe el crecimiento y por el otro, indica que se use la concesión a todo evento, si no, ésta caduca.
En entrevista con Salmonexpert, el jefe de la división de Acuicultura de Subpesca, Eugenio Zamorano, responde a las empresas que no existe contradicción en los objetivos perseguidos: un nivel de producción adecuado con rotación de operación entre concesiones, ya que esos son elementos clave para mantener un buen desempeño ambiental y sanitario. Sin embargo, esto no se ha dado y la autoridad explica las razones.
¿Es cierto que anteriormente las concesiones que estaban dentro de un barrio y que no se utilizaban se permitía ingresarlas al Programa de Manejo, lo que se contabilizaba como operación y que eso cambió y ahora solamente de deja un ciclo para que el centro descanse y en el siguiente, tiene que trabajar?
Lo primero que hay que dejar claro respecto de este tema, es que las concesiones de acuicultura utilizan bienes nacionales de uso público de todos los chilenos que fueron entregados en exclusiva a un titular para el ejercicio de la acuicultura. Por ese motivo es que la no utilización está sancionada con caducidad por la ley. Por lo demás, esto se ha visto corroborado recientemente por la Contraloría General de la República que ha ordenado al Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura implementar un procedimiento para controlar el uso de las concesiones y denunciar su caducidad.
En este contexto, hasta antes de la modificación del reglamento sanitario publicada en agosto de 2016, existía una disposición en dicho reglamento que permitía hacer descansar concesiones mediante un plan de manejo, pero al mismo tiempo al aprobarse por resolución erróneamente se entendía que era un descanso obligatorio que no se contabilizaba como falta de operación. Tal situación constituía un privilegio injustificado que además solo podían invocar los titulares de centros de cultivo de salmones porque no existen planes de manejo para otros cultivos aún.
Así las cosas, la modificación reglamentaria vino a acotar a esta posibilidad a una vez, haciendo coherente el reglamento con los objetivos de la ley. Sin embargo, subsisten otras disposiciones establecidas en la propia ley, especialmente su artículo 69 bis, que permite el descanso por más de un período en la medida que se fundamente en operación previa. Ello debe solicitarse a la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas.
De esta forma, actualmente el reglamento sanitario solo acota la posibilidad de descanso a través de un plan de manejo, pero no priva del derecho a hacer mejor uso de las concesiones mediante la rotación por aplicación de los derechos contemplados en la misma ley para todos los acuicultores.
¿Eso es contrario a lo que establecen como autoridad, pues los salmonicultores dicen que por un lado restringen el crecimiento y por el otro, indican que use la concesión a todo evento, si no, ésta caduca?
No existe contradicción en los objetivos perseguidos: nivel de producción adecuado con rotación de operación entre concesiones, esos son elementos clave para mantener un buen desempeño ambiental y sanitario. Sin embargo, la tan anhelada rotación no existe ya que los datos de cosecha del último year class dan cuenta que 27 agrupaciones, de un total de 61 agrupaciones en las regiones de Los Lagos y Aysén, concentran el 75% de la producción total.
Los ajustes normativos están diseñados para que la producción nacional pueda crecer siempre y cuando los indicadores sanitarios y ambientales den cuenta de que ello es posible.
¿Cuándo darán a conocer el informe de caladeros, para que las relocalizaciones operen y problemas como este se solucionen?
Las relocalizaciones de concesiones son un componente más en la consolidación del modelo productivo. La determinación de los caladeros de pesca requiere la dictación de un reglamento para lo cual a su vez, se elaboró una propuesta. Actualmente, nos encontramos trabajando en el diseño de un procedimiento de consulta amplia, de tal forma de recoger las distintas y diversas opiniones que pueden tener los actores clave sobre la propuesta de caladeros de pesca.
La relocalización es tarea de todos, ya que en algunos casos requiere la declaración de nuevas áreas apropiadas para la acuicultura que deben ser aprobadas por las comisiones regionales de uso del borde costero, y en esa instancia es donde hemos constatado el rechazo que aún existe por parte de la comunidad hacia esta industria. Por eso estimamos de la mayor relevancia que la industria trabaje para mejorar su relación con las comunidades en las cuales se inserta esta actividad.