Atando Cabos gana prestigiosos premios por impulsar economía circular en acuicultura

Recientemente, el proyecto que busca limpiar y darle una nueva vida a desechos acuícolas presentes en las costas del sur austral del país, Atando Cabos, ganó dos prestigiosos premios de carácter nacional e internacional.

El primero de ellos fue el Premio Nacional de Medio Ambiente, donde, según lo expuesto a Salmonexpert por el gerente general de Atando Cabos, Francisco Cruz, los organizadores valoraron “la aproximación holística que tiene Atando Cabos frente a este problema, donde buscamos terminar con la contaminación masiva de plásticos descartados en el ambiente”.

Cruz agregó al respecto que “utilizando las costas y fiordos de la Patagonia como caso inicial, implementamos iniciativas de economía circular transformando residuos plásticos en recursos de alto valor, produciendo impacto económico, social y ambiental para la cadena completa”.

Además, el gerente general de la iniciativa planteó que “implementamos la economía circular para reemplazar al modelo económico lineal imperante en la relación entre empresas, consumidores y autoridades, que deriva en una producción excesiva e irresponsable de residuos. También incorporamos tecnología de punta para hacer trazabilidad de la historia del material: desde su origen como residuo hasta su transformación a producto final”.

Sobre qué significa haber recibido este reconocimiento, Cruz comentó que “el Premio Nacional de Medioambiente es un reconocimiento importante. Cuando ves el jurado, está compuesto por personas del espectro empresarial, académico, político y comunicacional. Personas entendidas de los desafíos ambientales y en organizaciones conectadas con la realidad nacional. Este premio nos ayuda a darle visibilidad a nuestro proyecto y nos da energía para continuar”.

Premio internacional

De igual forma, Atando Cabos obtuvo el premio internacional "Rethink Plastics Challenge" (Desafío Repensar el Plástico, en español), el cual fue organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), junto con MIT Solve (del Instituto Tecnológico de Massachusetts), donde participaron mas de 550 proyectos de todo el mundo, incluidas otras iniciativas chilenas, como Algramo, que obtuvo el segundo lugar en la competencia, y que considera US$30.000 para el ganador.

"El Rethink Plastics Challenge fue una experiencia invaluable que va más allá del premio monetario que recibimos. El desafío fue una poderosa plataforma en la que los finalistas pudieron mostrar sus soluciones a los principales actores del campo de la sostenibilidad en América Latina", expresa Cruz.

Por último, al ser consultado el cómo toman como proyecto haber ganado estas dos distinciones, el ejecutivo señaló que “más allá del orgullo de haber sido reconocidos en Chile y en la región, el hecho de haber ganado lo tomamos como una validación del medio respecto de que nuestro proyecto es una solución viable para el problema de los descartes plásticos. Nos visibiliza en un momento donde estamos apostando por el crecimiento, por lo que nos sirve de ayuda para nuestros intereses de levantar capital y buscar socios estratégicos”.