De izquierda a derecha: José Soto; Mario Palma; Javier Carreño; Gonzalo Acevedo; Armin Ramírez. Foto: Atlantic Sapphire.

Talento chileno brilla en megaproyecto salmonicultor Atlantic Sapphire

Estados Unidos: Son cinco los chilenos que trabajan en áreas consideradas claves para el megaproyecto Atlantic Sapphire, el cual prevé producir 100% en tierra 220.000 toneladas de salmón en Estados Unidos.

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Mario Palma es un chileno que se desempeña como director de Acuicultura en el megaproyecto salmonicultor Atlantic Sapphire, específicamente en Homestead, Miami, Estados Unidos. Comenzó a mediados del 2017 en la unidad de negocios de Dinamarca de la empresa (Piscicultura Langsand) donde trabajó por más de un año a cargo de producción para posteriormente, en noviembre del 2018, moverse a su actual posición para recibir las primeras ovas de la iniciativa de cultivo en tierra.

Sin embargo, Palma trabaja con cuatro chilenos más en Atlantic Sapphire, cuyo talento brilla en este megaproyecto salmonicultor. Se trata de José Soto, FW Manager a cargo desde las áreas de Hatchery hasta Postmolts; Javier Carreño, Fish Farm Technician con un puesto más transversal en cultivo ciclo completo; Armin Ramírez, Quality Manager encargado de asegurar la calidad de los procesos productivos, y Gonzalo Acevedo, director de Proceso, quien es responsable de cosechar los peces y deliberar el producto final al consumidor. Cada uno de ellos, claves para el éxito de la compañía.

En entrevista con Salmonexpert, el director de Acuicultura de la iniciativa que prevé producir más de 220.000 toneladas métricas de salmón en tierra en Estados Unidos hacia 2031, habla sobre sus hitos en Atlantic Sapphire y qué innovaciones de este megaproyecto deberían ser aplicados por la industria chilena. 

¿Cuáles son sus principales responsabilidades, hitos logrados y objetivos a alcanzar en su cargo?
En Homestead estoy a cargo de un excelente equipo de personas, con las cuales nos encargamos de la etapa completa de cultivo desde ova ojo a cosecha. Esto conlleva planificación, maximización de producción, calidad de aguas, manejo y puesta en marcha de los sistemas de cultivo, movimiento de peces, bienestar animal y manejo de alimento entre otros. 

En términos de hitos, con el equipo de Dinamarca se logró validar muchas técnicas de cultivo, tecnologías, y procesos en general. Volvimos a cosechar después de un proceso fuerte de reingeniería de nuestro sistema de engorda Langsand 1, finalizando con la puesta en marcha de nuestro primer sistema modular unitario de engorda Langsand 2. El cual, por cierto, es el mismo que nos encontramos escalando acá en Miami.

En Estados Unidos, el desafío es constante, dinámico y de gran escala. Con el equipo de producción y operaciones, hemos logrado poner en marcha 10 sistemas de recirculación, operarlos en proceso de construcción general y crecer con nuestro plan nominal de producción. A la fecha, tenemos 4 millones de salmones Atlántico saludables nadando en nuestras dependencias ubicadas en el Caribe. Eso requiere mucha dedicación, pasión y, sobre todo, convicción de que nuestra tecnología trascenderá a nuevas generaciones como una manera sustentable de acuicultura.

Los objetivos son claros, ejecutar nuestro plan de cosecha: desarrollar nuestra organización y seguir creciendo con la compañía.

¿Qué importancia tiene el talento acuícola chileno en proyectos tan relevantes como Atlantic Sapphire?

Mario Palma, director de Acuicultura en Atlantic Sapphire. Foto: BioMar Chile.

Nuestra industria en Chile es madura, con procesos validados, mucho conocimiento de cultivo, RAS y en general, con un muy buen estándar en términos de buenas prácticas. Además, la industria es exigente, donde el trabajo es la única forma conocida por la mayoría de nosotros para tener estabilidad, bienestar, y con pena en el alma lo digo, educación y salud. Por ende, somos esforzados y empeñosos, tratando siempre de dar ese extra para lograr nuestros objetivos. Eso, en empresas multinacionales como Atlantic Sapphire, donde la cultura escandinava prepondera, es reconocido.

 Asimismo, me atrevo a decir que la simbiosis laboral entre chilenos y noruegos para este tipo de proyectos es súper poderosa.

¿Qué tecnologías disruptivas ocupa Atlantic Sapphire, las cuales, a su juicio, deberían ser usadas en la salmonicultura chilena?
Definitivamente, la tecnología de producción de peces grandes como es el caso de los Post smolts (400 gramos hacia arriba) en recirculación con agua de mar, es una tecnología aprovechable por la industria chilena del salmón para el acortamiento del ciclo en mar y el ejercicio de mayor control sobre la primera parte del ciclo en mar.

¿Cuáles son las ventajas de producir salmón en tierra? ¿Los sistemas RAS vinieron para quedarse?
En términos comparativos, existen muchas diferencias en la forma de producir, estructura de costos, huellas ambientales, sustentabilidad, y calidad. Nuestro modelo productivo es bastante simple en términos de cadena de valor, recibimos ovas, alimento y producimos filetes en el mismo techo, muy cerca del consumidor final. En tierra, no tenemos predadores, no existen riesgos sanitarios por coexistencia con otros centros de cultivo, no hay un efecto importante ligado a las inclemencias climáticas, el riesgo de escapes es casi nulo, entre otras cosas. 

A modo de proyecciones para el futuro, creo que la acuicultura en tierra llegó para quedarse y será parte del futuro de la industria salmonicultora.