¿Qué esperamos para subirnos al carro de la Revolución Circular?
*Columna de opinión para Salmonexpert de Benjamín González Esnaola, Fundador de Greenspot y Director en EcoValora.
Chile, como miembro de la OCDE, Alianza del Pacífico y otros acuerdos Internacionales, ha asumido una serie de compromisos de apertura comercial y de cumplimiento normativo, siendo a mi juicio uno de los más importantes el de lograr aumentar el uso de material reciclado a un 30% del total para el año 2030.
Esta meta es aún distante de las que se ha puesto la Unión Europea para el mismo objetivo, que se empina por el 60%: sí, está leyendo bien, 6 de cada 10 kilos de residuos serán reciclados en Europa en tal solo 8 años más. Aún más, para 2035 la meta es que solamente el 10% de los residuos vayan a vertedero.
Como uno puede suponer, esta tendencia y metas se están tomando el mundo, y están generando una nueva industria basada en la Economía Circular, generando oportunidades múltiples en todas partes del mundo para emprendedores e industrias, una nueva “revolución industrial”, esta vez no motivada por un gran descubrimiento como las máquinas a vapor, sino esta vez “obligada” por la urgencia medioambiental y de sustentabilidad.
Es así como varias iniciativas de reincorporación y valorización de residuos a la matriz productiva, junto con el análisis de los procesos, redefinición de los servicios y rediseño de productos, también están llegando y germinando en nuestro país generando nuevas fuentes de trabajo, nuevas innovaciones y nuevo valor, reconstruyendo la forma de interacción entre el Medio Ambiente, la Comunidad, la Industria y el Estado.
Ejemplos notables tenemos en el Sur de nuestro país -polo nacional en el Ecosistema Circular- , con iniciativas ligadas al plástico, caucho, telas, vísceras de peces y mariscos, plumavit, y una gran cantidad adicional de elementos.
Todo nace del ímpetu y convicción de emprendedores convencidos en esta #revolucióncircular, que con porfía y pasión impulsan sus empresas junto a la colaboración de Industrias como la acuícola, cuya participación y colaboración ha sido y será clave para la Sustentabilidad de estas nuevas empresas y en conjunto para la gestión medioambiental de la nueva sociedad.
Sin embargo, ninguna de estas iniciativas será sostenible en el tiempo sin la participación del #consumidorconsciente, nosotros, las personas que diariamente ejercemos un poder que muchas veces desconocemos y que corresponde a nuestra decisiones de compra.
No necesitamos -exclusivamente- de grandes campañas, o políticas públicas para comenzar a elegir y priorizar lo que compramos, esa compra, ese voto de confianza que diariamente ejercemos multiplicado por muchas personas es capaz de levantar iniciativas y también de generar cambios de forma rápida sin depender de las Política Públicas.
Tenemos la posibilidad de transformar nuestra zona sur austral en ícono de Sustentabilidad, los emprendedores estamos trabajando, las Industrias están colaborando, la Comunidad está más informada, entonces, ¿qué esperamos para subirnos al carro de la #revolucioncircular?