Las propuestas programáticas de Sebastián Sichel frente a la salmonicultura
Chile: El candidato de Chile Vamos a la presidencia del país, buscará aumentar la transparencia de la industria en materia de antibióticos, y apoyará la tendencia de producir peces en tierra.
Sebastián Sichel es el candidato de Chile Vamos a la elección presidencial de noviembre de 2021, tras ganar la primaria de su coalición realizada el 18 de julio de ese año. Y ya tiene una serie de propuestas para alcanzar una industria salmonicultora más sustentable y competitiva.
En entrevista con Salmonexpert, su Jefa de Programas, Victoria Paz, entrega las definiciones programáticas de Sebastián Sichel frente al sector salmonicultor nacional.
¿Cuáles son las propuestas de Sebastián Sichel para una salmonicultura más sustentable?
La salmonicultura es una industria de alta importancia para nuestro país y como tal presenta posibilidades y también desafíos.
Es importante avanzar en comprender el comportamiento e impacto en el ecosistema, considerando aspectos como la alimentación, los desechos y su impacto en los lechos marinos, el uso de químicos, antiparasitarios y antibióticos. En forma adicional, hay que avanzar en la normativa de prevención y sanciones en materia de mortalidad y escapes y planes de captura, ya que estos impactos son muy difíciles de remediar.
En forma adicional, vemos que una de las tendencia de la industria es hacia la producción en tierra de al menos una parte del proceso de crecimiento y de cara al futuro hay que ver cómo generar las facilidades para que la industria avance en los modelos de producción
Por lo anterior es que nuestra propuesta es trabajar arduamente, para impulsar una industria acuícola con mirada de largo plazo, relacionada a un ecosistema de I+D+i, que fomente el emprendimiento, la economía circular y la sustentabilidad del sector.
¿De qué manera se logra una salmonicultura más competitiva en Chile?
Chile es el segundo productor más relevante a nivel mundial. Creemos que la industria de la salmonicultura tiene un tremendo potencial de crecimiento, con un impacto muy relevante en el empleo y el desarrollo de las regiones australes por lo que debemos seguir avanzando de manera conjunta entre la industria, la academía, emprendedores e innovadores y el Estado, incorporando soluciones a los desafíos planteados, entre ellos prevenir y mitigar impactos ambientales, manejo de antibióticos y relación con las comunidades.
Para lograr eso debemos recorrer una ruta que incluye inversión y desarrollo y todos los miembros del ecosistema debemos aunar el esfuerzo y tener claro que el objetivo es alcanzar una mejor industria que en última instancia nos permitirá tener una visión y acción sostenible, neutra y responsable y con ello mantener a esta industria competitiva en los mercados internacionales, lo que genera mayor riqueza para todos.
¿Qué mejoras regulatorias aplicarían en la industria chilena del salmón bajo su eventual Gobierno?
La mirada sectorial que estamos haciendo de las diversas industrias del país se centra principalmente en entender las oportunidades de largo plazo con especial foco en la sostenibilidad. Uno de los pilares de nuestra propuesta es tener una economía basada en la sustentabilidad y el emprendimiento y eso implica estudiar y conocer cómo apoyar, desde las políticas públicas y bajo reglas claras y estables, a toda la economía nacional, pero con una mirada para los próximos 30 años.
En particular para la industria de la salmonicultura creemos que existen algunas materias en las que se debe avanzar, como por ejemplo en facilitar el acceso a la información, aumentar la transparencia en materia de antibióticos y químicos en general, esto en conjunto con potenciar las acciones de fiscalización. Esto sin duda debe complementarse con empresas socialmente responsables y activas en su autorregulación.
¿Avanzarán en la esperada relocalización de concesiones, para que se ocupen mejores espacios de producción de salmónidos?
Tenemos un compromiso con estudiar los mecanismos que generen mayor bienestar a las comunidades, al ecosistema natural y que sea un promotor del emprendimiento y del desarrollo regional. Adicionalmente, vemos que una de las tendencias que se están estudiando en la industria es mover a tierra al menos una parte de la producción, por lo que hay que tener una conversación con todos los agentes involucrados y con una mirada de largo plazo para potenciar el desarrollo de la industria, con el apoyo del Estado y respaldo de la ciudadanía y comunidades locales.
¿Cómo lograr que la salmonicultura chilena, como la noruega, sea un polo de innovación y desarrollo?
La investigación, el desarrollo y la innovación (I+D+i) son un desafío en distintos sectores del país, recordemos que Chile gasta 0,3% del PIB en I+D, y que debiera multiplicarse en al menos 10 veces para lograr el estándar deseado.
Debemos avanzar en todo lo relacionado a la generación del conocimiento, donde creemos que debe existir una democratización en el acceso a programas de magíster y doctorados, ya que el número de investigadores en Chile es relativamente bajo. Noruega, por ejemplo, tiene más de doce veces el número de investigadores que tiene Chile cada millón de habitantes.
Debemos también incentivar una cultura empresarial abierta al emprendimiento y la innovación. Nuestro país es un laboratorio natural en muchos ámbitos y debemos avanzar hacia el desarrollo e intercambio acelerado de conocimientos.