Actividad salmonicultora en lagos. Foto: WWF Chile.

Talleres de redes critican propuesta para seguir cultivando peces en ríos y lagos

Chile: La Asociación advierte sobre el impacto ambiental de salmónidos en el ecosistema de agua dulce, agregando que es mala señal para quienes están invirtiendo para instalar pisciculturas en tierra.

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En reciente sesión de la Comisión Nacional de Acuicultura, de la cual la Asociación de Talleres de Redes, Atared, es integrante, sometió a consideración modificaciones al Reglamento Sanitario. Dos de ellas, de acuerdo con lo informado por el gremio, “nos merecen objeción mayor”.

Una de ellas tiene que ver con el Artículo 23 P, donde se promueve extender el uso de ríos, lagos y estuarios para cultivo, además de subir el peso de cosecha. “Se argumenta bajo riesgo sanitario, pero el tema es el impacto ambiental de la biomasa en el ecosistema de agua dulce”, manifiestan desde Atared. 

El año 2013, afirman desde la Asociación, se decidió eliminar el uso de agua dulce por razones de tipo ambiental y político. Se dieron tres de gracia, luego se renovó el período por otros tres ejercicios y ahora sería indefinido. 

“Hoy casi no se usan ríos, lagos ni estuarios tanto por los motivos referidos como para reducir pérdidas. Varios están derivando a pisciculturas en tierra. ¿Qué señal se les está dando frente a las inversiones que hicieron o harán? Podría aducirse competencia desleal, como también podrían suspender esas inversiones y volver a ríos, lagos y estuarios, recreando conflictos evitables”, alertan desde Atared. 

Asimismo, el tamaño de smolt tradicional es entre 80 y 150 gramos y la propuesta lo amplía a 400 gramos, tamaño pan size, para restoranes, sostienen desde la Asociación. “Si bien el proceso fisiológico que experimentan los peces para cambiar de agua dulce a marina es objeto de aplicaciones tecnológicas para retrasarlo, esto sólo busca reducir la pérdida de biomasa en mar por enfermedades. Eventualmente, este cambio podría ir hasta el kilogramo de peso, según Sernapesca, por el bajo riesgo de enfermedades en peces que tienen hasta dicho peso. A mayor biomasa, mayor producción de desechos biológicos, pérdida de alimento que cae al fondo y residuos de fármacos eventualmente. Todo lo cual afecta el ambiente y resistencia de otros usuarios”. 

Jaulas con materiales flexibles

Luego, otra de las modificaciones al RESA que preocupa a Atared, es la que permite la permanencia de jaulas confeccionadas con materiales flexibles (de mayor tecnología) postcosecha y en período de descanso: “El argumento sanitario que justificaría a juicio de Subpesca la permanencia de la jaula post cosecha no se entiende, toda vez que en una jaula sin peces no existe la tríada que define el riesgo: ambiente, patógenos y huésped”. 

“Asimismo, el período de descanso entre un ciclo y otro es breve, por tanto, parece inoficioso pedir análisis de riesgo en ese lapso. La autoridad argumenta que, dada la nueva tecnología de estas estructuras flexibles, es razonable puedan permanecer en el mar. Pero, por una parte, no precisa cuáles serían tales características que ameritan permanezca en el agua y por otra, al tener la facultad de hacer excepciones con algún propósito definido como se indica en el Artículo 23 R, no lo explicita. ¿Qué hace a este material tan diferente, que lo justifica?”, apuntan desde la Asociación.

Para Atared, “la incorporación de nuevas tecnologías es irrebatible y no se está en contra de eso. Pero en la medida que nuevos materiales desplacen -por razones de eficacia y eficiencia- a los talleres de mantenimiento de redes, lo menos que se debe pedir al Estado es que se trabaje con antelación en alternativas productivas al subsector de turno que se vea afectado, y se establezca un cronograma de implementación, entre otras cosas”.