Es responsabilidad de todos resolver incertidumbres en torno a la salmonicultura
*Columna de opinión para Salmonexpert de Miriam Chávez, secretaria de la Multisindical de Trabajadores de la Industria del Salmón y Ramas Afines.
La región de Magallanes a una zona del país de suma relevancia para el desarrollo de la salmonicultura chilena. Por eso recientemente como representantes de los trabajadores y trabajadoras participamos en Punta Arenas en el Encuentro Aquaforum, una instancia donde tratamos de visibilizar la importancia que esta actividad productiva, cuyo desarrollo se dio principalmente en los años 80.
Creemos que es necesario avanzar juntos en impulsar esta industria, corregir sus errores y aprovechar las oportunidades que nos da este sector para el desarrollo regional, principalmente en la zona sur de nuestro país.
La Multisindical de trabajadores del salmón y ramas afines –gremio que representa 21 federaciones de trabajadores de la salmonicultura- está consciente que hay espacios para mejoras y abordar una serie de desafíos principalmente en materia de sostenibilidad y marco laboral, pero también tenemos claro que cerca de 70 mil personas trabajan en esta actividad y que miles de familias han crecido, estudiado y desarrollado su vida en torno a ella.
Es por eso que nos preocupa que hoy haya voces, alentadas por ONGs muchas de ellas internacionales y que desconocen la realidad nacional, que abogan por el fin de la salmonicultura chilena y hacen llamados ortodoxos que omiten el impacto en el empleo y en el bienestar de las familias. Así lo planteamos en Aquaforum pues creemos que existe una manipulación de ONGs que utilizan la ley Lafkenche para bloquear cualquier tipo de desarrollo productivo, en particular a la salmonicultura.
Sabemos que existe una falta de recursos para los Servicios Públicos que están implicados en la institucionalidad de la actividad acuícola en Chile y que es necesario mejorar la coordinación de las distintas entidades que tienen competencia en la aplicación de la Ley Lafkenche. Por eso hacemos un llamado a las autoridades y empresas a abordar este tema.
La exorbitante cantidad de espacios solicitados por medio de la Ley Lafkenche, la que hoy llega a 4 millones de hectáreas solicitas en 87 ECMPO es una total desproporción.
Es responsabilidad de todos resolver las incertidumbres que existen en torno a la salmonicultura, impulsar su desarrollo y trabajar en una agenda con mirada de largo plazo que dé un impulso a la salmonicultura con foco en la sostenibilidad y la calidad del trabajo, y que considere una mayor vinculación entre las comunidades y la industria.
Esperamos que prime el diálogo en este desafío y por eso en el Aquaforum propusimos iniciar una mesa de trabajo ampliada con Autoridades del Sector, Pesca Artesanal, Pueblos Originarios, Trabajadores, Industrias, y Academia, que revisen la aplicación práctica en aspectos tan relevantes como conflictos por el uso de Espaciosa, Funcionamiento de la CRUBC y los criterios de solicitudes.
Sólo a través de la búsqueda de consensos seremos capaces de aprovechar las ventajas que tenemos como país e impulsar industrias sostenibles que velan por el bienestar de sus trabajadores.