“Sembrar post smolt permite apostar a una producción más exitosa”

El grupo AKVA está creciendo en Chile de la mano de varios proyectos RAS para la salmonicultura: allí destacan las pisciculturas Novofish en Huelmo, Sealand 1, 2 y Smolt 10 en Chayahue, y también la instalación de Mowi ubicada en Fiordo Aysén.

Pero, ¿realmente el futuro de la industria del salmón se enfoca en centros RAS? Esta respuesta y otras más son respondidas por Mary Ann Rademacher, gerente general de AKVA group Land Based Américas, en entrevista dada a conocer en la última edición de revista Salmonexpert.

“Definitivamente seguirá creciendo y hay varias razones detrás de esta afirmación. Por una parte, los sistemas RAS son más sustentables y amigables con el medio ambiente, dado el bajo uso de agua fresca y al mismo tiempo, se produce una menor contaminación e intervención del medio ambiente”, de acuerdo con la ejecutiva.

Por otra parte y no menos importante, “utilizar sistemas RAS para producir los peces hasta tamaños de smolt o post smolts, permite proporcionarles un ambiente productivo más controlado y estable, independiente de las estaciones, disponibilidad de agua, entre otras cosas”.

Según Rademacher, la producción en RAS para peces hasta smolt o post smolt es más sustentable “y permite proyectar la industria hacia el futuro, incluso si el cambio climático se profundiza y nos vemos enfrentados a menos agua disponible y temperaturas más altas. La rentabilidad siempre viene dada de la mano de la operación, el plan de negocio y otros factores propios de cada empresa, hasta ahora, ha sido una forma rentable de producir peces”.

“La evidencia que existe hasta ahora indica que mientras más corto sea el período que pasan los salmones en el mar, menor probabilidad de enfrentar problemas sanitarios que conllevan mortalidades, malos rendimientos, entre otras cosas. Sembrar post smolt permite planificar la producción de manera de no solamente tener un ciclo más corto en el mar, sino también evitar los períodos más complejos y así apostar a una producción más exitosa”, indica la representante de AKVA group.

Rademacher apunta que los sistemas RAS permiten producir peces de alta calidad en condiciones controladas y más sustentable, “lo que representa una gran ventaja respecto de las tradicionales pisciculturas de flujo abierto. En mi opinión, una de las mayores desventajas es el nivel profesional que demanda del staff que las opera, donde se hace indispensable personal calificado y entrenado, porque son instalaciones más complejas de operar y donde a veces errores o cambios que parecen pequeños pueden acarrear problemas importantes”.

Para leer la entrevista completa en revista Salmonexpert (páginas 32 y 33), haga click en la imagen.