¿Pueden las algas reducir la aparición de piojos en el salmón?
Noruega: Un grupo de investigadores descubrió que el salmón alimentado con microalgas registró menos piojos que los que recibieron alimento comercial normal.
Durante más de un año, los investigadores de UiT, la Universidad Ártica de Noruega y Nofima en la ciudad de Tromsø, han estado investigando si las microalgas árticas pueden ser un elemento disuasorio para los piojos de salmón.
En su sitio web, UiT afirma que las microalgas que son algas de sílice, se producen bajo las operaciones de las fundiciones UiT y Finnfjord, y en el proceso las microalgas eliminan CO2 y NOx que de otro modo habría sido liberado.
Según informa el sitio asociado a Salmonexpert, Kyst.no, el proyecto es financiado por el Fondo Noruego de Investigación de Productos del Mar (FHF, por su sigla en inglés) y fondos regionales del condado y ha examinado, por ejemplo, que la proporción de omega-3 a omega-6 en el alimento, puede tener cierta relación con lo atractivo que es el salmón para los piojos. Los investigadores asumieron que un contenido reducido de omega-3 en el alimento ha llevado a que el salmón secrete menos oxilipinas en la piel.
Factor oxilipinas
Los investigadores también tenían documentación de que las oxilipinas de las algas pueden ahuyentar a los invertebrados, incluidos los piojos de salmón. Querían probar si era posible reducir la aparición de piojos de salmón mediante, entre otras cosas, el uso de algas en la alimentación.
“Hemos llevado a cabo varios experimentos en los que hemos incluido algas, petróleo crudo y aceite de pescado normal en el alimento, y lo hemos comparado con el alimento vegetal normal. Después de esto, los investigadores de UiT y Nofima analizaron los suplementos de piojos”, explica Ragnhild Dragøy Whitaker, jefe de investigación de Nofima, a Kyst.no.
Ella explica que observaron reducciones significativas en la absorción de piojos, especialmente cuando se usa alimento agregado a las algas y cierta reducción con el alimento agregado a Calanus.
“Además, estamos investigando varios parámetros en el proyecto, incluidas la piel, el crecimiento y el contenido de grasa en los peces”, detalló la investigadora. Whitaker explica que el proyecto no está completamente terminado y que aún quedan más análisis.
“Observaremos, entre otras cosas, los niveles de oxilipina en la piel y cuál es la razón para que el salmón tenga menos piojos. Hasta ahora, acabamos de confirmar que es así”, señala la investigadora.
Fuente alternativa
Otro aspecto importante del proyecto es encontrar nuevas fuentes de aceites y proteínas marinas que puedan usarse en la alimentación de peces. “Las microalgas pueden ser beneficiosas para todos, porque consumen gases de CO2 de la industria pesada (la fundición Finnfjordbotn), y porque esto se puede ampliar a tamaño industrial completo”, explica Whitaker.
Aunque las microalgas pueden ser una fuente alternativa de aceites y proteínas marinas, aún queda mucho por hacer antes de usar las microalgas. “La pregunta es cuánto volumen podemos producir y cuánto se puede incluir en el alimento mientras se mantiene un buen crecimiento. Esto es lo que los investigadores de Nofima están observando”, dice la investigadora.