Evalúan reemplazo de ingredientes marinos con microalga en dietas de salmón
Noruega: Científicos descubrieron que inclusiones de hasta un 10% de Nannochloropsis oceánica en la dieta de salmón Atlántico mantiene los niveles de ácidos grasos EPA y DHA y no afecta el crecimiento.
Las microalgas son una buena fuente de aminoácidos, ácidos grasos poliinsaturados y astaxantina, sin embargo, sólo algunas especies han logrado un escalamiento comercial para poder ser incluidas en dietas para salmónidos y permitir el reemplazo de ingredientes marinos.
Las paredes celulares rígidas de las microalgas disminuyen la digestibilidad y la biodisponibilidad de nutrientes en peces carnívoros, pero procesos termomecánicos como la extrusión pueden mejorar la utilización de nutrientes.
Con la idea de resolver estos problemas, científicos de Noruega, Portugal y China realizaron un estudio para investigar el potencial de:
i) Nannochloropsis oceánica procesada termomecánicamente (extruida) como ingrediente en dietas con alto contenido vegetal y bajo contenido de ingredientes marinos.
ii) Dos aditivos alimenticios diferentes para mejorar la utilización y digestibilidad de nutrientes en dietas con N. oceánica.
Para ello, los expertos formularon cuatro dietas, una de control sin inclusión de N. oceánica, una dieta con 10% de la microalga preextruida y dos dietas con 10% de la microalga preextruida y complementadas con un ingrediente fitogénico al 0.06% o 1% de zeolita natural, para aumentar la digestibilidad.
Luego de que distintos grupos de salmones Atlántico fueran alimentados con las diferentes dietas durante 68 días, los investigadores observaron que la digestibilidad aparente de materia seca en los grupos alimentados con la microalga fue mayor, sin embargo, la digestibilidad de lípidos fue menor en comparación con el grupo control.
“La incorporación de 10% de N. oceánica preextruida en alimentos comerciales no afectó el crecimiento, la utilización de alimentos y la composición corporal del salmón”, señalaron los investigadores en sus resultados.
Asimismo, no evidenciaron efectos adicionales de los aditivos alimenticios sobre el crecimiento, la utilización del alimento y la histomorfología del intestino distal de los peces. Tampoco encontraron diferencias en los ácidos grasos poliinsaturados en todo el cuerpo de peces de los distintos grupos.
“Cabe señalar que los niveles de EPA + DHA de todo el cuerpo de los peces alimentados con microalgas se mantuvieron en los mismos niveles que los peces alimentados con la dieta control que contenía 50% más de harina de pescado y 10% más de aceite de pescado”, concluyeron los autores del estudio.
Lea el artículo completo titulado “Approaches to improve utilization of Nannochloropsis oceánica in plant-based feeds for Atlantic salmon” aquí.