Prebióticos: la nueva apuesta para la salud de los peces
Chile: En la cuarta versión del Science On, BioMar dio a conocer los resultados experimentales de Synbiotics, una nueva dieta para salmones que combina prebióticos y probióticos.
Ayer, en el Hotel Cumbres de Puerto Varas, la empresa de alimentos realizó el cuarto Science On de este año cuyo foco estuvo puesto en los probióticos. Desde los beneficios en la salud humana, hasta su uso en la acuicultura y resultados contra patógenos específicos fueron los tópicos de las distintas charlas.
Incremento en el rendimiento
En esa línea, Torunn Forberg , investigadora senior del área de Salud en BioMar Group, mostró los resultados que han tenido en ensayos experimentales tanto en campo como en condiciones controladas, de un producto denominado Synbiotics, el cual posee una mezcla de prebióticos y probióticos que permite obtener mejores resultados.
A pesar de que existen estudios del uso combinado de ambos ingredientes en varias especies acuícolas, no hay estudios en salmones.
Como BioMar posee el único probiótico autorizado por la UE para uso en alimentos en la acuicultura, decidieron incorporar además prebióticos y probar sus efectos luego de la transferencia al mar.
La experta comenzó mostrando los resultados de un primer estudio en jaulas de mar donde compararon los efectos productivos de alimentar a peces con una dieta de transferencia solo con prebióticos y una Synbiotic, versus una control sin ninguno de los dos.
Comparado con el control, luego de 10 semanas post transferencia, evidenciaron un incremento estadísticamente significativo del TGC (coeficiente térmico de crecimiento) con la dieta sólo con el prebiótico, pero además, con la dieta Synbiotic fue aún mayor. Significativamente mejor
“También pudimos observar que el factor de condición (k) fue mayor, por lo que de alguna manera estos peces crecieron más y mejor aumentando el rendimiento, pero sin observar efectos adversos a nivel intestinal”, informó.
Sin embargo, los peces presentaron alteraciones a nivel cardiaco, algo que luego fue explicado debido a una infección con PRV. No obstante, al mismo tiempo, pudieron determinar que la carga viral de los peces alimentados con Synbiotic fue estadísticamente menor.
Alimento medicado
Por otro lado, los investigadores de BioMar también quisieron probar si su nuevo aditivo ayudaba al problema que representan los alimentos medicados en cuanto a la disminución del consumo de alimento y rendimiento.
Luego de un ensayo de 13 semanas realizado en el centro ATC Patagonia, en donde incorporaron antibiótico a la dieta control y Synbiotic por un período de dos semanas, pudieron observar diferencias en el SGR (tasa de crecimiento específico) y TGC.
“Pudimos observar que la medicación afecta negativamente ambos grupos, sin embargo, el TGC fue mayor en el grupo alimentado con Synbiotic. Asimismo, vimos que la medicación afecta negativamente el SGR en el grupo control, pero no al grupo alimentado con Synbiotic”, señaló Torunn Forberg .
Sumado a estos resultados, cabe destacar que no se observaron signos de inflamación en hígado, corazón ni intestino y el consumo de alimento se mantuvo igual durante toda la prueba.
Sin embargo, los peces presentaron alteraciones a nivel cardiaco, algo que luego fue explicado debido a una infección con PRV. No obstante, al mismo tiempo, pudieron determinar que la carga viral de los peces alimentados con Synbiotic fue estadísticamente menor.
Reducción en el uso de antibióticos
En cuanto a la importancia del I+D detrás del desarrollo de nuevos productos, Óscar Berríos, Product Manager SW & Functional Feeds de BioMar, comentó que “somos una de las empresas que más invierte en I+D y prueba de ello es nuestro centro de investigación avanzada, donde los resultados que salen de ahí tienen un tremendo impacto que ya podemos observar. Siempre estamos haciendo actualizaciones y mejoras en el rendimientos de nuestros productos”.
“Creemos que este producto va a generar un tremendo salto en términos cualitativos y cuantitativos y en términos de mejora sanitaria de la industria junto con contribuir en la reducción del uso de antibióticos. Los probióticos son una de las herramientas más potentes que han salido en los últimos 10 años. Incorporarlos en el alimento es un tremendo desafío tecnológico, y sin embargo nosotros lo hemos logrado”, puntualizó.