Transformando la acuicultura: Descubriendo los desafíos de la Resolución 1821

*Columna de opinión para Salmonexpert de Darío Coñonir, Ingeniero de Proyectos en Green Aqua.

La Resolución 1821, se encuentra ad-portas de su entrada en vigor y sin duda, irrumpirá en las metodologías que se han adoptado a lo largo de los años. En este contexto, dicha normativa entrega directrices claves para el análisis integral de los centros acuícolas presentes en nuestro país. Si bien es cierto, existe un clima de incertidumbre en varios aspectos de esta resolución, también existe un cierto optimismo en relación con la certificación y la definición de la metodología para el análisis de los centros acuícolas principalmente en el diseño de sistemas de fondeos, logrando establecer que estos sean más robustos y con mayores factores de seguridad para resistir posibles eventos ambientales catastróficos en un corto plazo.

¿Qué establece la nueva normativa respecto a datos ambientales y fondeo? La norma parte estableciendo las bases del levantamiento, medición y análisis de los parámetros ambientales para el diseño de los centros de cultivos, tanto para vientos, olas y corrientes. La resolución busca estandarizar las condiciones ambientales en términos de periodos de retorno de 10 y 50 años. Cabe mencionar, por ejemplo, que para la medición de corrientes la normativa establece un periodo mínimo de 30 días, con intervalos de muestreos que no podrán exceder los 10 minutos; además, como se mencionó, para la estimación de periodos de retorno, la resolución entrega una estimación asequible para las magnitudes de corrientes, con factores de 1.65 y 1.85 para 10 y 50 años de retorno respectivamente (algo similar a la norma Noruega NS 9415, que estableció las directrices del diseño por muchos años en chile).

De igual forma, las mediciones de olas y viento están definidas en esta resolución, y vienen a endurecer y reforzar la necesidad de tener bases de datos históricos y llevar a cabo un análisis estadístico de los valores extremos que genere estimaciones con periodos de retornos de 10 y 50 años. Ahora bien, la pregunta es: ¿La industria ha generado datos históricos de mediciones de vientos en los sectores de cultivo? No se tienen registros prolongados de datos ambientales, sin embargo, en los últimos años se ha avanzado e intensificado los esfuerzos por parte de la industria acuícola para concretar este desafío. Lo que conlleva a que los análisis estadísticos que actualmente se desarrollan presenten un grado de incertidumbre elevado para la proyección de datos a 10 y 50 años de retorno. Como consecuencia, se obtienen datos de viento y olas poco acertados, que se irán mejorando en la medida de que se aumenten los datos históricos de las mediciones.

En esta misma línea, la resolución 1821 orienta respecto a: estudios de Batimetría, elementos que configuran un módulo de cultivo e implicancias que se deben adoptar a través de las memorias de cálculo de fondeos. Es en este último punto es donde más se han acentuado los criterios del diseño y calculo para el sistema de fondeos, entregando dos métodos de análisis: estático y dinámico. El primero de ellos entrega un cálculo inexacto y que va en desuso frente a las herramientas disponibles en la industria. Y el segundo, un método vigente a través de un análisis de simulación dinámica, sustentado por el método de elementos finitos (MEF) con dominio en el tiempo, que realiza un análisis global de las fuerzas generadas por la interacción de componentes rígidos y flexibles, para este análisis, existen actualmente algunos softwares presentes en la industria, por mencionar un ejemplo, AquaSim un software desarrollado por Aquastructures con representación en América por Green Aqua; el software tiene una amplia trayectoria en la industria acuícola y que hoy por hoy entrega múltiples herramientas para el análisis del comportamiento de redes, fondeos, artefactos navales, entre otras aplicaciones.

Ambos análisis atienden a 3 condiciones: el primero de ellos es el análisis Intacto (SFI), donde se presenta el artefacto naval en las condiciones iniciales de instalación, es decir, redes y fondeos sin presencia de foulling. El segundo, una condición con 50% de foulling adicional (ScF), una condición más similar a una condición de operación y finalmente condición de línea cortada (ELA) donde se debe identificar la máxima tensión por caso analizado y accidentar (o cortar) dicha línea de fondeo para identificar el comportamiento y fuerzas del artefacto naval. Implicancias de la resolución 1821 en los fondeos.

El nuevo marco regulatorio, resulta en un sistema de fondeos más robusto, considerando un 49.5% en factores de seguridad (ambiental y tipo de análisis), que afecta directamente al cálculo del factor de utilización (inferior a 1) descrita en la regulación, además del aumento en las cargas de fuerzas axiales producto de las combinaciones de parámetros ambientales con periodos de retornos. La certificación, es un concepto que trae esta resolución, donde será obligatorio para cada centro de cultivo contar con certificaciones semestrales y anuales que estarán a cargo de Certificadores calificados con vasta experiencia en el sector acuícola. La implementación de esta resolución tiene como propósito estandarizar la forma y el diseño de los sistemas en la industria acuícola en su conjunto. Su principal objetivo es salvaguardar y prevenir incidentes que en el pasado han sido debido a la carencia de un documento normativo como el que esta resolución representa.

El principal desafío de la industria es aplicar la nueva metodología reglamentada a todos sus centros de cultivo, además de dar comienzo, o mejor dicho a robustecer las bases de datos ambientales de los diferentes sitios del sur de Chile, es una tarea maratónica que la industria está trabajando a toda máquina para lograrlo, para esto, los proveedores de servicios juegan un papel fundamental y que deben estar alineados a esta resolución, para dar cumplimento al pie de la letra esta normativa.