Presentan nuevos hallazgos en cuanto a la replicación del ISAV en sangre
Noruega: Expertos descubrieron, entre otras cosas, que los eritrocitos del salmón Atlántico se unen al virus y secuestran partículas infectivas durante la enfermedad, limitando su replicación.
Científicos de Noruega, Dinamarca e Islas Feroe publicaron recientemente un estudio donde, entre otras cosas, descubrieron que los eritrocitos del salmón Atlántico se unen al virus y secuestran partículas infectivas durante la enfermedad, pero no parecen contribuir significativamente a la replicación del ISAV.
Lo anterior, lo evidenciaron luego de una serie de experimentos in vitro e in vivo, que incluyeron dos estudios de infección experimental, donde trabajaron con cepas HPR∆.
Si bien, según los autores, la unión del virus con los eritrocitos es común y precede al desarrollo de la enfermedad, como se ha demostrado en otras ocasiones y asociado también a la anemia característica de la enfermedad, los eritrocitos limitaron la infección de forma dependiente de la dosis.
“Sorprendentemente, la inmunotinción de frotis de sangre reveló que la expresión de proteínas de ISAV se lleva a cabo en una pequeña fracción de eritrocitos, confirmando que el virus se puede internalizar en este tipo de células y activar la maquinaria celular en la transcripción y traducción. Sin embargo, la expresión de la proteína viral en los eritrocitos fue rara y no necesaria para el desarrollo de la enfermedad y la mortalidad”, explicaron los investigadores.
Además, evidenciaron una transcripción activa de ARNm viral que fue mayor en los tejidos que en la sangre, lo que respaldó su teoría de que la replicación viral tiene lugar predominantemente en las células endoteliales de corazón y riñón.
De la misma forma, los expertos observaron que las partículas virales asociadas a eritrocitos que lograron una infección efectiva con replicación, siguen siendo infecciosas.
No obstante, quedan algunas interrogantes. Por ejemplo, si el secuestro de partículas virales por parte de los eritrocitos implicaría la diseminación de las mismas a través de la sangre hacia otros órganos del pez.
“Si bien el peak de viremia ocurre al mismo tiempo o después del peak de transcripción viral en el corazón y el riñón, detectamos proteínas virales en los eritrocitos a los cuatro días post infección. Si la unión de ISAV a los eritrocitos limita la capacidad de infectar sitios distantes, como en nuestro sistema de modelo celular, o si promueve la infección, por ejemplo, al proteger el virus de factores antivirales en el suero, sigue siendo una pregunta abierta”, concluyeron.
Revise el estudio completo titulado “Salmon Erythrocytes Sequester Active Virus Particles in Infectious Salmon Anaemia”, aquí.