Alicia Gallardo, directora nacional de Sernapesca. Foto: Sernapesca.

Sernapesca revela su estrategia para resolver diferencias técnicas con Rusia

Chile: Un equipo de Sernapesca investiga cómo la autoridad sanitaria rusa llegó a la conclusión técnica de que parte del salmón chileno contenía trazas de Oxitetraciclina, bloqueando su ingreso.

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“Justamente recién me llegó un oficio de Rosselkhoznadzor, donde se levanta el bloqueo a cuatro plantas de salmón chileno”. Con estas palabras, inicia su entrevista con Salmonexpert la directora nacional de Sernapesca, Alicia Gallardo, refiriéndose específicamente al fin de las restricciones a las empresas Australis Seafoods y Nova Austral por parte del Servicio Veterinario de la Federación Rusa.

Es importante destacar, de acuerdo con Gallardo, “que, con esta decisión de la autoridad sanitaria rusa, se reconoce que Sernapesca da las garantías de cumplimiento de la normativa de ese país, en el caso de estas cuatro plantas, tras la última reunión que sostuvimos”.

¿Qué sensación le dejó su reciente reunión con la autoridad sanitaria rusa?
Hay un ánimo de colaboración mutua entre los dos servicios sanitarios y nosotros haremos algunos ajustes a los programas de exportación a Rusia, donde inicialmente nos juntaremos con los productores de salmón chilenos esta semana para realizar un análisis de las no conformidades y así efectuar los perfeccionamientos respectivos. Incluso, nos interesa revisar nuestro programa de uso de antimicrobianos (PROA) y si llevamos a cabo ajustes.

¿Y qué pasará con otros productores de salmón chileno que siguen bloqueados por Rusia, como Yadran, Mowi, Camanchaca y Blumar?
La mayoría de estos bloqueos son por trazas de Oxitetraciclina, y son las que más nos preocupan, pues como le dije a las autoridades rusas, nosotros detectamos negativo y ellos positivo respecto al antibiótico, entonces queremos compartir nuestro dossier con sus representantes y los resultados de nuestra investigación. Es más, mandaremos una misión técnica a sus laboratorios en las próximas tres semanas, que incluye a la Dra. Betty San Martín, directora del Laboratorio de Farmacología Veterinaria de la Universidad de Chile, y un profesional de Sernapesca.

Estas empresas aseguran que no usaron Oxitetraciclina en su cadena productiva. 
Es algo que debemos analizar técnicamente, partiendo por la revisión de la metodología, el tipo muestreo y los análisis de los riesgos de trazas en la cadena.

Recuerda que la autoridad sanitaria rusa tiene un límite establecido, referente a residuos de antibióticos, de 10 microgramos por kilo (10 partes por billón), nosotros contamos con un límite de 200 partes por billón, y Europa tiene un límite de 100 partes por billón. 

De todos modos, les pasa lo mismo a las autoridades rusas en su mercado local: algunos de sus productores dicen que no usan antibióticos, pero después sí son detectados en los análisis. Es muy probable que esto abra un análisis relativo a dónde está la contaminación con el fármaco o si existen diferencias de metodología y muestreo.

¿Existe, entonces, un proteccionismo ruso a su producción seafood local?
Al respecto, lo que sí puedo decir que la autoridad sanitaria rusa es muy prestigiosa en el mundo, igual que nosotros, y sus sistemas de laboratorio operan con una calidad relevante. Así que debemos revisar dossier por dossier para evaluar si existen diferencias y, de hecho, esta semana tenemos una reunión técnica por videoconferencia con sus representantes.

Quiero decir, además, que me reuní con los productores de salmón de Rusia, donde pudimos ver que ellos tienen una industria creciente y nos hicieron notar que su mercado local puede ser compartido entre el salmón ruso y el salmón chileno. Me llamó la atención que ellos valoran mucho la calidad del salmón chileno.