Reportan que uso de antibióticos se incrementó en la salmonicultura chilena

Ayer, Sernapesca publicó el “Informe sobre uso de antimicrobianos en la salmonicultura nacional” con cifras correspondientes al primer semestre del presente año. Las cifras generales de cantidad de antimicrobianos utilizados en este período por la industria, equivalen a 242,39 toneladas de principio activo.

Comparado con el mismo período del 2020, la cantidad global de este tipo de fármacos se incrementó en 14,8% (211 toneladas de principio activo en 2020, de acuerdo con el reporte de la Autoridad).

En detalle, de las 242,39 toneladas de principio activo utilizadas durante el primer semestre del año en curso, el 98,96% fue administrado en fase de mar y el 1,14% en etapa de agua dulce.

De esta última fase, 69,17% de los antibióticos usados correspondió a oxitetraciclina, 28,28 % a florfenicol, 2,09% a eritromicina y 0,47% a  tilmicosina, destacando la disminución porcentual de oxitetraciclina desde un 82,34% en 2020 a un 69,17% en 2021, y el incremento porcentual de florfenicol desde 13,03% a 28,8%.

Luego, el reporte detalla la distribución porcentual de la cantidad de antimicrobianos administrado por diagnóstico en ambas etapas del ciclo productivo, donde se evidencia un aumento del porcentaje de fármacos utilizados para tratar la flavobacteriosis, de 49,43% a 70,34%, y una reducción en el porcentaje de antibióticos usados como tratamiento para la renibacteriosis, de 49,37% a 29,35%.

Para el caso de agua de mar, la piscirickettiosis se mantuvo como la principal enfermedad para la cual se utilizaron antimicrobianos (93,53%), pero la tenacibaculosis se posicionó en el segundo lugar, lugar que hasta el primer y segundo semestre del 2020 se ubicara en tercer puesto luego de BKD.

En el primer semestre del 2021, también aparece un porcentaje menor de antibióticos para tratar la flavobacteriosis en mar (0,09%).

Asimismo, de acuerdo con lo expuesto en el informe, el presente año el Servicio incorporó restricciones al uso de antimicrobianos de importancia crítica en salud humana.

“La generación de incentivos para aquellos productores que están a la vanguardia de la gestión sanitaria, que se traduce en una optimización del uso de antimicrobianos, se plasma a través de la certificación gubernamental que el Servicio entrega a través del PROA-Salmón, programa que partió en marzo del 2020 y ya ha recibido más de 176 solicitudes de inscripción, de las cuales a la fecha se han certificado 23 centros que han terminado su ciclo productivo”, se indica en el ireporte de Sernapesca.

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