Inician contactos con salmonicultoras por nueva tecnología que baja uso de diésel
Chile: La experiencia probada incorpora baterías de litio de última generación, que se cargan a partir del generador, pero al mismo tiempo lo reemplazan parcialmente, permitiendo adecuar la entrega de energía.
Un relevante desarrollo surgió de la colaboración entre Asmar Magallanes y la empieza privada Lambda Ingenieros, el cual se podría aplicar en la industria acuícola con el fin de reducir drásticamente el uso de diésel para generar energía.
La alianza público privada detrás de este proyecto ya lleva cuatro años de trabajo en los que pudo medir los efectos de la hibridación en la generación de energía eléctrica en reparticiones aisladas de la Armada en la región de Magallanes.
En este período también han iniciado contactos con las empresas salmonicultoras Blumar y Cermaq para probar la tecnología en los centros de cultivo. Los resultados obtenidos hasta ahora, según los responsables del proyecto, harían muy atractiva para la industria implementar la tecnología en sus instalaciones y en las naves que prestan servicios a las empresas.
La propuesta busca reducir de manera importante el uso de generadores alimentados con diésel mediante la adición de otras fuentes de energía. La experiencia probada por Asmar y Lambda Ingenieros incorpora baterías de litio de última generación, que se cargan a partir del generador, pero al mismo tiempo lo reemplazan parcialmente, permitiendo adecuar la entrega de energía a la demanda efectiva.
Y es que la premisa es que el uso exclusivo de generadores diésel para un proceso productivo demanda que estén funcionando las 24 horas del día, lo que se traduce en importantes pérdidas de combustible porque se genera más de lo que se necesita, y una mayor emisión de gases contaminantes.
“Con la hibridación se busca balancear lo que se genera respecto de lo que se necesita”, comentó el gerente de Lambda Ingenieros, Rodrigo Oporto, en un seminario donde presentaron los detalles del proyecto. Explicó que “a través de electrónica de potencia somos capaces de administrar los distintos horarios de generación de estos elementos y entregar en función de lo que realmente se necesita en el lugar de trabajo”.
Para respaldar la propuesta exhibió los resultados en los sitios donde están aplicando el mecanismo y que dependen exclusivamente de generación propia, como sería un centro de cultivo: la reducción de consumo de diésel en un grupo electrógeno va entre un 70% y 80%; el consumo de combustible pasó de 10.920 litros en un año a sólo 2.922; el tiempo de operación del generador transitó 8.760 horas a apenas 2.473 en un año; y la emisión directa de CO2 a la atmósfera pasó de 28,3 toneladas a 7,6 toneladas en el mismo período.
“Los centros de cultivo de salmones trabajan sin hibridación, como no hay energía directa tienen generadores en pontones que trabajan con una lógica de baja eficiencia y gran impacto de huella de carbono”, describió el especialista.
Por su parte, el administrador de Asmar Magallanes, Gonzalo Mitrovich, señaló que “la dependencia de la industria acuícola de generación propia de energía es una restricción que obliga a la industria a tomar medidas de eficiencia para cumplir con la legislación ambiental y avanzar en carbono neutralidad”