Científicos buscan utilizar nueva tecnología para combatir al piojo de mar
Noruega: Un proyecto liderado por investigadores noruegos planea usar la edición de genes, para lograr que el salmón Atlántico sea más resistente a los piojos de mar: la respuesta podría estar en el salmón coho.
Científicos de Nofima están liderando un proyecto en el que investigarán detalladamente las bases genéticas que hacen al salmón coho más resistentes a la infestación con el parásito, para luego determinar si ese conocimiento puede ser utilizado para preventir la infestación en el salmón Atlántico de cultivo.
“Si podemos hacer que el salmón Atlántico sea altamente o completamente resistente a los piojos, no es una exageración pensar que el conocimiento que generaremos en este nuevo proyecto podría transformar la acuicultura noruega”, manifiesta el investigador senior y líder del proyecto en Nofima, Nick Robinson.
Edición genética
Los expertos del proyecto describen en el sitio web del centro de investigación que las diferencias genéticas hacen que el salmón Atlántico sea un hospedador más atractivo que las otras especies como el salmón coho.
Estas diferencias pueden significar, por ejemplo, un producción de atrayentes químicos por el salmón Atlántico o una respuesta de defensa más efectiva contra los piojos recién adheridos de la piel del salmón.
Aquí es donde entra la herramienta de edición de genes “Crispr-Cas9” desarrollada por Emmanuelle Charpentier y Jennifer Doudna, ganadoras del Premio Nobel de Química, ya que podría usarse para eliminar algunas secuencias de bases del código genético para interrumpir la función de un gen.
“Crispr-Cas9 es todavía una tecnología relativamente nueva en la investigación acuícola, pero puede permitir cambios muy precisos y específicos en genes específicos del genoma del salmón que se sabe que están involucrados en la variación entre especies en la resistencia a los piojos de mar, y el éxito de su uso depende del tipo de cambio que se necesite y de la posición y el código del gen que se va a editar ”, explica el profesor Ross Houston del Instituto Roslin del Reino Unido, cuyo equipo trabajará en estrecha colaboración con Nofima en ésta y otras partes del proyecto.
Selección de genes
En detalle, los investigadores encontrarán y medirán los componentes químicos que libera cada especie de salmón. Luego, probarán cómo reaccionan los piojos de mar a cada uno de los químicos únicos liberados por el salmón Atlántico y determinarán cuáles de ellos son los que pueden atraer o repeler los parásitos.
También realizarán experimentos para estudiar la respuesta a los piojos adheridos por diferentes tipos de células en la piel del salmón, y cómo ésta respuesta difiere en las especies más resistentes de América del Norte como el salmón coho.
Finalmente, los investigadores determinarán qué genes están afectando la producción de estos químicos y la respuesta de diferentes células de la piel, y después probarán cómo estos genes pueden ser "alterados" usando Crispr-Cas9 para hacer que el salmón del Atlántico no sea atractivo para los piojos.
El proyecto estará dirigido Nofima, e implicará una estrecha colaboración con socios de investigación del Instituto Roslin (Universidad de Edimburgo, Reino Unido), el Instituto de Acuicultura (Universidad de Stirling, Reino Unido), Rothamsted Research (Reino Unido), la Universidad de Melbourne (Australia), la Universidad de Prince Edward Island (Canadá), el Laboratorio Bigelow de Ciencias Oceánicas (Estados Unidos), la Universidad de Gotemburgo (Suecia) y el Instituto de Investigación Marina (Noruega).
Benchmark Genetics y Salmar serán socios de la industria en esta relevante iniciativa.