El complejo escenario financiero del que intenta recuperarse Australis Seafoods
Chile: Drásticos ajustes en cosechas, bajas en precio del salmón, y su autodenunciada sobreproducción, han generado problemas de acceso al crédito y atrasos en el pago a proveedores de la empresa.
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Luego de advertir una sobreproducción sistemática y reiterada en casi la totalidad de sus centros de cultivo, iniciada, planificada, y ocultada por varios años, según Australis Seafoods, presentó una autodenuncia por dicha situación ante la SMA en octubre de 2022, la cual fue admitida en marzo de 2023 y por la que se formularon cargos en 54 ciclos, sembrados entre los años 2016 y 2021.
Junto con lo anterior, la compañía realizó los ajustes en la producción, y operacionales, para cumplir 100% los límites regulatorios desde inicios de 2023, así como también responder a los programas de presentados a la autoridad. Lo anterior, ha significado una drástica reducción en las cosechas de este año, casi de un 50% respecto del 2022, generando impactos importantes en los costos dada la inercia natural del negocio, y el período requerido para realizar los cambios “que nos harán volver a la eficiencia y productividad prontamente”.
Adicionalmente, y relacionado con lo anterior, Joyvio y la salmonicultora han iniciado una serie de acciones legales contra los vendedores y algunos exejecutivos de la empresa, entre las que se cuentan la presentación de dos querellas en Chile, una por fraude y otra por administración desleal, además de una demanda arbitral.
De este modo, desde la firma admiten que estas acciones han significado una serie de desafíos para la compañía, “con los cuales hemos estado batallando en los últimos meses, y de los cuales estamos convencidos saldremos fortalecidos. Uno de ellos es el acceso al crédito (o a la mantención de las líneas previamente otorgadas), el cual ha sufrido una importante contracción por decisiones propias de los mismos acreedores”.
Otro de ellos, y vinculado con el anterior, ha sido el cumplimiento de los plazos de pagos con sus proveedores, de quienes están muy agradecidos, pues en su mayoría sienten la confianza, empatía y el apoyo en este momento. Con lo anterior los proveedores se han visto complicados por algunos atrasos en los pagos, lo que se agrava con la reducción de las líneas de crédito, a las que podrían tener acceso para financiar sus facturas.
En China, por su parte, la matriz de Australis Seafoods, la empresa Joyvio Food, ha debido realizar un procedimiento de reorganización, regulado por el mercado financiero de ese país, luego del cual se espera recibir capital que permita liquidez, mejoramiento de la estructura de capital, y refinanciamiento. Este procedimiento fue iniciado a comienzos de agosto y esperan concluya dentro de los próximos meses, lo que les permitirá terminar el 2023 con sus cuentas regularizadas.
“Respecto a los atrasos que hemos tenido como empresa, estos se deben principalmente a que los acreedores financieros han disminuido las líneas de crédito a Australis en forma importante, requiriendo el pago de las obligaciones sin posibilidad de renovar. Adicionalmente, el precio en el mercado del salmón experimentó una fuerte caída en los meses de mayo y junio, lo que desajustó todas las proyecciones e impidió cumplir algunos compromisos previamente pactados con proveedores, los que se han retomado luego de este período”, detallan.
En relación a las publicaciones en Dicom, las cuales han ido regularizando en las últimas semanas, se deben principalmente a compañías de Factoring, que al estar actualmente en una situación que las afecta como industria, tomaron una posición más conservadora publicando tan pronto existe algún atraso. “Cabe aclarar que no hay ni ha habido publicaciones en Dicom relacionadas con proveedores de alimentos para peces”, aseguran.
Hoy, de acuerdo con la salmonicultora, la única deuda garantizada de la empresa es con Bank of China Macau Branch, préstamo que prepagó el antiguo crédito sindicado de Australis Seafoods en el momento de la compra por parte de Joyvio. El resto de los créditos bancarios en Chile corresponden principalmente a préstamos de anticipo a exportaciones (PAEs).
