Autoridad de Seguridad Alimentaria detecta inadecuado bienestar de los peces

Roger Pedersen de Grieg Seafood Finnmark.

Noruega: En las jaulas 1 y 7 del sitio de la salmonicultora Grieg Seafood, según la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria, hubo una mortalidad semanal de más de 7 veces lo normal.

Grieg Seafood notificó a la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria el 19 de septiembre sobre un aumento de la mortalidad debido a la deficiencia de oxígeno durante la eliminación de piojos en su sitio Grøtnes N en Hammerfest, Noruega.

Además, el 21 de septiembre se les notificó un aumento de peces con úlceras/espironucleosis.

En un informe de inspección al que tuvo acceso Kyst.no, medio asociado a Salmonexpert, la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria escribe que durante la inspección a finales de septiembre había varios miles de muertos en las jaulas.

“La mortalidad era alta. Consideramos que el bienestar en varias jaulas no es justificable y por eso anunciamos una decisión para garantizar el bienestar adecuado de los peces en todas las jaulas”, escribieron a la empresa.

En la jaula 1, donde los decesos fueron mayores, la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria detalla que hubo aproximadamente 2.000 muertos, que deben haber consistido en una mezcla de peces con heridas en el hocico, heridas en la cola, heridas en los costados, ojos afectados y desgaste de las aletas.

“Se observa que las aletas dorsales sobresalen de la superficie del agua en varios lugares de la jaula. En los peces muertos se encontraron varios con forúnculos y llagas en la aleta caudal”, indicaron.

La Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria define el aumento de la mortalidad como una mortalidad diaria superior al 0,25 por mil por día en grupos de peces (jaulas) que pesan más de 500 gramos en promedio.

En las jaulas 1 y 7 del sitio, hubo una mortalidad semanal de más de 7 veces lo que la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria define como mortalidad aumentada.

El contacto comunitario Roger Pedersen de Grieg Seafood Finnmark le dice a Kyst.no que a la empresa se le detectó espironucleosis en varias jaulas en 2022. Después de esto, se puso en marcha un programa de seguimiento en el sitio, así como un estudio de las instalaciones marinas.

“En el mismo período, determinadas jaulas han tenido una alta tasa de mortalidad y se ha decidido sacrificarlas. Hemos mantenido un diálogo con la Autoridad Noruega de Seguridad Alimentaria durante todo el proceso y hemos considerado cuál es la opción correcta y tenemos en cuenta el bienestar de los peces", afirma Pedersen.