Uso de Inteligencia Artificial para la obtención de un filete de salmón óptimo
Chile: BioMar y Lythium han innovado para monitorear la calidad del filete de salmón tanto en centros de cultivo como plantas de proceso. Los resultados están siendo positivos para la industria.
A través del uso de esta tecnología, BioMar y Lythium han innovado para monitorear la calidad del filete de salmón tanto en centros de cultivo como plantas de proceso y así analizar estrategias nutricionales para un insuperable producto final.
“Cuando desarrollamos un producto tangible como un pellet, estamos entregando nutrición. Al entregar nutrición, existe traspaso de conocimiento. Si entregamos conocimiento, estamos dando un producto, que llega a un mercado y un consumidor final. Por lo tanto, ese consumidor está comprando el resultado de todo un proceso en la cadena de valor del salmón”, comenta a Salmonexpert, Óscar Berríos, Product Manager de BioMar Chile.
“Como BioMar, somos parte importante de esta gran cadena de valor, porque estamos presentes desde las materias primas, hasta el óptimo uso de estas. Esto se refleja en la performance del pez. Actualmente, ya no basta con solo alimentar salmones, sino que lo importante es cómo los alimentas, con qué y para qué, logrando una mejor performance, con mejor crecimiento en el menor tiempo posible, todo aparejado a aspectos de sostenibilidad y amigable con el medio ambiente”, expresa el profesional.
Lo anterior, a juicio de Berríos es el foco puesto en los centros de cultivo. “Estamos muy satisfechos porque actualmente 8 de cada 10 mejores centros de la industria son alimentados con dietas BioMar, con conversiones bajo 1, peso de cultivo sobre 6 kilos y 10 meses de engorda en mar”.
Paralelamente, BioMar también está enfocados a cómo se presenta el pescado en la góndola a los consumidores. “Los aspectos cualitativos del salmón son igualmente relevantes, como el color, Omega 3 o calidad del filete. En esta área cumplimos un relevante rol para que nuestros productos incidan en el producto final”, destaca el ejecutivo de BioMar.
Es en este punto, donde la Inteligencia Artificial (IA) se ha convertido en una gran herramienta. “Detectamos que nuestros clientes tienen ciertas calidades en planta, con niveles de variabilidad y además, cada uno las mide de manera distinta, dependiendo del mercado. Por ello, planteamos estandarizar este aspecto para que, con la data obtenida, el productor pueda hacer mejoras en el área nutricional y la estrategia comercial”, recalca Berríos.
Para esto, cuenta el producto manager, analizaron información de calidad, y a través de la IA con ciertos algoritmos, se podía detectar si el filete era el izquierdo o el derecho, medir el color del dorso, la parte central o del corte noruego. “Y podemos tener aún más información del pescado, como el centro de procedencia, con qué fue alimentado, estatus sanitario, de que piscicultura vino, la ova de origen. Todo esto, hace que sea más eficiente la cadena de valor, ya que se cuenta con información y control auditable”.
Bajo todos estos parámetros, hace tres años BioMar generó una alianza con Lythium, empresa que poseía la tecnología y el perfil que la productora de alimentos requería para desarrollar una forma innovadora de potenciar los resultados del salmón para el consumidor final.
Calidad del filete
Por eso, el 2020, BioMar introdujo IA a las acciones de monitoreo de calidad que se realizan en laboratorios, a través del equipo portátil QualityBox. Este equipo fue diseñado especialmente para los muestreos de peces durante el cultivo y permite realizar un análisis de calidad de filete in situ facilitando una toma de decisión oportuna. La misma tecnología es la que ocupan los equipos instalados en cinco plantas de proceso, logrando el escaneo del 100% de los filetes de la línea para un análisis objetivo y consistente de la calidad final de los productos.
“Paralelamente a esto, estamos trabajando en el monitoreo de calidad del filete, antes del ingreso a centros de cultivo de engorda, en todo el ciclo, midiendo color, proteína, lípidos, textura del filete. Por lo tanto, no solo medimos el resultado final, si no cómo llegamos a ello, linkéandolo a los tipos de dieta. Esto, le da herramientas a los clientes para decidir que estrategia nutricional ocupar y además, poder cultivar peces para un mercado en específico”, agrega Berríos.
A juicio del ejecutivo, el uso de IA es un elemento diferenciador para la compañía. “Manejamos más de 18 millones de datos, recibiendo aproximadamente 15 mil datos diarios por cada equipo instalado. Además, los clientes tienen reportes en línea de cómo están saliendo los lotes, ya que el programa contempla el monitoreo de atributos y alteraciones en términos de color, melanosis, gaping, hematomas y cracking. Con esta información, se pueden tomar una serie de decisiones relevantes para el proceso de producción”, detalla el especialista.