Hacernos responsables, hacernos cargo
*Columna de opinión para Salmonexpert de Cristian Andler, socio fundador de Greenticket.
Ya no cabe duda que el cambio climático es real y no le vamos a discutir a casi totalidad de la comunidad científica, a un número creciente de grupos sociales, empresariales y políticos de los más diversos países que están convencidos de que el cambio climático originado por las actividades humanas constituye uno de los mayores desafíos ambientales que se pudieran interponer en el camino hacia el desarrollo sustentable durante el presente siglo.
No hacerse cargo de esto, es como pedir un crédito y esperar que lo paguen tus hijos.
Por otro lado vemos que la cantidad de iniciativas, certificaciones, índices, etcétera, que promueven la sostenibilidad no ha parado de crecer. Y por su lado gran parte del mundo empresarial no se ha quedado atrás sumándose virtuosamente a gran parte de estos desafíos. Pero desde un punto de vista lógico, a pesar de tener una oferta no menor de posibles soluciones al problema, las emisiones de CO2 no paran de aumentar año a año y los problemas aún siguen ahí.
Esto pone en tela de juicio todo el sistema y la transparencia de éste. Bueno, sólo a modo de ejemplo la semana pasada vimos un tweet de Elon Musk donde acusa que ESG es una estafa. La razón, Exxon está clasificado entre los diez mejores del mundo en medio ambiente, sociedad y gobernanza (ESG) y es súper factible poner en tela de juicio ese resultado, no nos olvidemos que Exxon es una de las empresas con mayor responsabilidad en todo lo relativo al cambio climático.
Actualmente la transparencia es unos de los mayores activos de las empresas. La transparencia es clave para los consumidores, que incluso dudan de las empresas “perfectas”. Todo lo que hacemos tiene un impacto, la clave es reconocer ese impacto y mejorar ese impacto. Es por eso que es más importante que nunca entender que ya no sirve mostrar, ahora hay que demostrar.
Volviendo al cambio climático, la preocupación de los consumidores por el tema se ha disparado en la última década. A medida que las personas se vuelven más conscientes del impacto al clima de sus acciones, esperan lo mismo de las marcas que consumen, y probablemente se ayuden de las mismas para bajar su impacto eligiendo a las con menor huella ambiental.
Es ahí donde el sector tiene mucho que ganar. Ya sabemos que el salmón es una de las proteínas con menor huella de carbono “esto fue estar parado en el lugar correcto en el momento correcto”, el animal tiene la mejor conversión dentro de las proteínas que cultivamos o criamos. Pero paralelamente el sector ha entendido la oportunidad de ser parte de la solución al problema y es por eso que este camino ya lo tomó la industria del salmón hace un tiempo atrás.
Desde hace ya varios años que el sector viene midiendo su huella de carbono metódicamente, incluyendo cada año más consistencia en su reportabilidad y trabajando proactivamente en la reducción de sus huellas ambientales.
Y lo que hemos visto el último tiempo es el camino lógico que debería tomar el sector. La Carbono Neutralidad es posible, como le decíamos anteriormente en una de las proteínas con menor impacto al clima, por lo cual ser una sin impacto al clima es el camino a tomar.
¿Qué significa ser carbono neutral? Ser carbono neutral significa lograr que las emisiones emitidas por una empresa o producto sean equivalentes a cero, para conseguir esto es necesario crear planes de acción y así reducir, compensar y/o remover las emisiones generadas. En conclusión hacerse cargo y demostrar un compromiso ambiental.
En el sector ya vemos que muchas de sus empresas se han dado cuenta de que la acción sobre el clima es fundamental para su éxito. Estas empresas probablemente cosechen las recompensas de mayores ingresos, costos y riesgos reducidos.