Superintendencia del Medio Ambiente intensificará fiscalización a salmonicultoras
Chile: Por medio de la nueva estrategia de conectividad en línea, la SMA establecerá alertas preventivas ante desviaciones ambientales detectadas en los centros de engorda de salmón.
La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) está reforzando su fiscalización a la industria chilena del salmón, con la aplicación de la estrategia de monitoreo en línea en los próximos meses, que le permitirá evaluar intensivamente el comportamiento ambiental de este sector. Importante acción a concretarse, dado que sus centros de engorda en las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes representan cerca del 30% del total de sector regulado por la entidad.
En entrevista con Salmonexpert, el superintendente de Medio Ambiente, Cristóbal de la Maza, afirma que, en el marco de este nuevo modelo a materializarse prontamente, “la conectividad en línea constituye uno de los pilares fundamentales dentro de lo conocido como la estrategia de cumplimiento de última generación, establecida por la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos. Esta acción permite, en términos generales, establecer alertas preventivas frente a desviaciones ambientales que se generen durante el ciclo productivo de operación de un centro de engorda de salmón, con el objeto de evitar efectos adversos sobre el medio ambiente y la biodiversidad”.
“El disponer de esta información en línea permite no solamente al operador del centro de engorda de salmones, sino que, de manera complementaria a los órganos fiscalizadores del Estado, visualizar el comportamiento de variables ambientales de interés, así como la oportuna adopción de acciones preventivas tomadas en los centros monitoreados”, asegura de la Maza.
¿Qué prioridad tiene para la SMA la fiscalización a la salmonicultura?
El haber comenzado esta experiencia con los centros de engorda de salmón (CES) da cuenta de la importancia relativa que este sector tiene para la SMA, especialmente en las zonas del sur de nuestro país, como son Los Lagos, Aysén y Magallanes. Los CES en estas tres regiones representan cerca del 30% del total de sector regulado (con RCA).
En esta línea, se ha preparado para el año en curso un programa de fiscalización específico para el sector donde uno de sus pilares fundamentales es la prevención y la corrección temprana de las desviaciones. La salmonicultura es un sector estratégico a nivel nacional e internacional y, por lo tanto, debe ir caminando hacia el cumplimiento robusto de la legislación ambiental y el desarrollo sostenible en el tiempo.
¿Tienen suficientes fiscalizadores y elementos para vigilar la salmonicultura?
Los recursos para fiscalizar son siempre limitados y como organismo público debemos optimizar nuestro actuar. Si mantenemos los mecanismos tradicionales de fiscalización, esto quiere decir basados sólo en inspecciones, no hay posibilidad alguna de contar con un fiscalizador por CES o en su defecto, con un número importante de fiscalizadores por región.
De esta forma, el modelo de fiscalización remota constituye una pieza fundamental para vigilar de manera certera a este sector productivo y aumentar paulatinamente la cobertura en el mismo sin la necesidad de actuar presencialmente, disminuyendo de esta forma la incidencia de factores externos tales como condiciones climáticas adversas o la indisponibilidad de medios logísticos para el acceso a las instalaciones.
¿Esta información nada más la manejarán autoridades como la SMA, Sernapesca y Directemar o también han evaluado que pueda ser usada por la comunidad científica?
La información generada será analizada por los tres servicios mencionados lo que no obsta que en una segunda fase pueda ser compartida con la comunidad científica en los territorios de interés.