Comunidad responde a Novofish y mantiene su denuncia por eventual daño a humedales

Imágenes: Comunidad Lago Siete Islas.

La agrupación Lago Siete Islas acusó que la empresa salmonicultora habría manipulado cursos naturales de agua y también intervenido cauces con su proyecto.

En relación a las denuncias en contra de la empresa Novofish, la Comunidad Lago Siete Islas inserta en los sectores Huelmo, San Agustín y Rulo, emitió una declaración pública.

El Lago Siete Islas, afirmaron, “es un espejo de agua que se extiende a la vera de la ruta costera V815 Puerto Montt- Calbuco, entre los kilómetros 18 y 22. Este lago, rodeado de humedales y pequeñas lagunas, no sólo es el hábitat de especies de flora y fauna sino también el lugar de residencia de una gran comunidad”.

La empresa Novofish, indicaron, adquirió recientemente un predio de 8 hectáreas a orillas del Lago Siete Islas a la altura del kilómetro 21 y a partir de los primeros días de febrero 2025 “comenzaron su intervención no autorizada ocasionando un daño irreparable que los vecinos relevamos y denunciamos formalmente ante las autoridades de distintas competencias”.

“La movilización de nuestra comunidad convocó el día lunes 24 de febrero a autoridades de Calbuco en la persona de su alcalde, concejales y funcionarios de Medio Ambiente quienes solicitaron la presencia de la empresa, representada por el Sr Andrés Bozzo. En la ocasión se recorrió parte del predio y se pudo constatar el daño denunciado y el nivel de afectación”.

En su “defensa”, manifestaron, “el representante de Novofish declaró ante todos los presentes que los trabajos que realizan son parte de su Proyecto Parque Rulo cuyo fin es la “conservación y estudio de la biodiversidad, la reforestación, la educación ambiental y recreación de sus trabajadores”. Sin embargo, el representante de la empresa no pudo explicar la relación del supuesto proyecto con la destrucción ocasionada hasta ese momento, a saber”:

• Remoción de la mayor parte de la flora existente (Tepú entre otros)

• Excavaciones de 3 metros de profundidad e instalación de tuberías de 80 cm de diámetro entre lagunas

• Manipulación de cursos naturales de agua e intervención de cauces

• Destrucción total de pomponales y remoción de turberas

• Vaciamiento de pequeñas lagunas y humedales existentes

La acción de los vecinos, detallaron, quedó reflejada también los días martes 25 de febrero con las fiscalizaciones de la Dirección General de Aguas, la Conaf, la Superintendencia de Medio Ambiente y fundación Ambyter, y jueves 27 de febrero con la fiscalización del SAG, instituciones que relevaron los daños causados y emitirán sus informes técnicos en el plazo de ley.

“La comunidad se siente profundamente agraviada frente a la actitud de la empresa y su relato ambientalista y de responsabilidad social. Cada recorrido efectuado junto a autoridades profundiza la preocupación y pesar frente al irreparable daño causado. Nos mantenemos en alerta permanente y a la espera de los informes técnicos para continuar con nuestra defensa del espacio que habitamos y cuidamos”.