“Hay empresas que defienden sus concesiones como si todas fueran valiosas”

El año pasado, se cambió el Reglamento Sanitario. Previamente, las concesiones que estaban dentro de un barrio y que no se utilizaban, se permitía ingresarlas al Programa de Manejo respectivo, lo que se contabilizaba como operación. Eso se modificó y ahora solamente se deja un ciclo para que el centro descanse y en el siguiente, éste debe ser trabajado.

Buena parte de los salmonicultores acusa que esto provocaría una expansión descontrolada de las siembras y por tanto, de la producción, siendo contrario a lo que establece la autoridad, que por un lado restringe el crecimiento y por el otro, indica que se use la concesión a todo evento, si no, ésta caducaría.

Pero el gerente general de Nova Austral, Nicos Nicolaides, piensa diferente y contó a Salmonexpert que hace algunos años Subpesca y Sernapesca consideraron como aceptable que en un barrio en que hay muchas concesiones, no se usaran algunas para resguardar sus índices sanitarios.

“Es decir, yo dejo en descanso un determinado centro, en beneficio del barrio. Como todas las cosas, algunos abusaron e incluyeron ciclo tras ciclo las concesiones que no sirven para nada y que no se han usado nunca, con lo cual no eran susceptibles de caducidad”, detalló el ejecutivo.

Al notar esto, la autoridad, decidió terminar esa situación irregular. Para ello, permite actualmente poner en descanso una concesión en beneficio del barrio por una vez, en un Plan de Manejo Sanitario, después de lo cual se debe cultivar en ella o se amenaza caducidad.

Si la razón es realmente esa, entonces se puedo rotar y en un ciclo descansa la concesión A mientras la empresa usa la B, y en el período siguiente descansa la B mientras la compañía usa la A. El efecto de este ajuste “es que los centros que no sirven para nada, tienen permiso para seguir vigentes con este argumento, por 1 ciclo más (24 meses) luego de lo cual, si no se utilizan, se debieran extinguir”, expresó Nicolaides.

“Creo que es bueno ir limpiando de concesiones que no sirven para nada y que solamente complican la posibilidad de relocalización. Algunas empresas advierten que, si se hace esto, entonces deberán cultivar en esas operaciones, lo que es muy negativo. En muchos casos eso no es más que una amenaza, porque no caben ni las jaulas o bien son tan malas, que es suicidio el usarlas. Hay otros en que se podrían utilizar, pero gracias a las reglas de densidades y score de riesgo actuales, eso tiene límite. No se puede aumentar en forma dramática la siembra en los distintos barrios”, reveló el gerente general de Nova Austral.

El ejecutivo subrayó que existen empresas salmonicultoras “que defienden sus concesiones como si todas fueran muy valiosas y no es así. El hecho es que en las regiones de Los Lagos y Aysén existe un exceso de centros, más de 1.200 en total. Lo lógico es eliminar los que sólo hacen número y ocupan espacio. Lo último impide realizar las micro-relocalizaciones que son pequeños ajustes a la posición de una operación, que resolverían muchos problemas actuales de ubicación levemente desviada o sub-óptima”.

Magallanes

En tanto, Nicolaides criticó que un grupo de empresas de la Asociación de la Industria del Salmón de Chile (Salmonchile) proponga crecer en la región de Magallanes.

“Esto es un insulto a la inteligencia y una muestra que no han aprendido nada de la historia. A esos mismos hay que preguntarles si conocen la exitosa trayectoria de cultivo de la región de Aysén, que mientras tuvo menos actividad y menos centros, era excelente. Tenía resultados sanitarios y productivos muy buenos comparados con la región de Los Lagos. Dado eso, todos fuimos a trabajar ahí, con las negativas consecuencias conocidas”, argumentó.

“Dado esa triste experiencia, en la región de Magallanes somos conservadores. Es curioso que uno tenga que decir cosas obvias y teóricamente aprendidas. Sostenemos que existe una determinada capacidad. Mientras estemos en el lado correcto, dentro de los límites, los resultados productivos van a seguir siendo destacables, con empresas capaces de cultivar sin usar antibióticos. Si sobrepasamos lo adecuado, la experiencia dice que el medioambiente te pasa la cuenta y se pone todo malo”, alertó el ejecutivo.

El gerente general de Nova Austral lamentó que Salmonchile “ceda a la presión de algunas empresas para defender lo indefendible. Estas situaciones dan pie a algunos detractores de la industria a decir que no tenemos límites, que nada nos importa, que sólo tenemos una ambición desmedida y somos capaces de pasar por encima de cualquiera”.