Directemar detalla cambios para mejor control de dotaciones mínimas en naves

El problema de la escasez de personal marítimo es transversal a nivel nacional. Desde Directemar sostienen a Salmonexpert que “estamos analizando soluciones de corto plazo junto a los gremios y sindicatos involucrados, del mismo modo que con armadores e industrias afectadas, esperando alcanzar soluciones positivas y de fácil implementación”.

Considerando las soluciones, se ha planteado el ingreso de extranjeros a las dotaciones chilenas por parte de los gremios, y desde la Autoridad Marítima admiten que “tras un análisis se puede señalar que el ordenamiento jurídico nacional permite el ingreso de extranjeros bajo ciertas condiciones. Sin embargo, creemos que primero debemos explorar y consensuar acciones que permitan la dinámica de fortalecer las dotaciones nacionales y de no cubrirse la demanda, incursionar en otras medidas respectivas”.

También, se han expuesto soluciones como reducir a la mitad tiempos de práctica para carrera de Oficiales, y subsidiar los estudios para ingresar al sector. La entidad manifiesta que “los procesos de formación contemplan períodos prácticos, que son significativos para la validación de los conocimientos adquiridos para la obtención de los títulos”. 

“Dicho esto, no descartaremos ninguna posibilidad que nos permita generar soluciones adecuadas a las necesidades de incrementar el número de personal idóneo para la conformación de dotaciones. En primer orden, creciendo por la base, lo que implicaría motivar y lograr que los jóvenes se interesen por la carrera marítima. Es oportuno indicar que ser marino mercante es una profesión especial por las condiciones en que se desenvuelven las personas, más aún, en un ambiente laboral que ha sido afectado por la pandemia”, indican desde Directemar. 

Recientemente, la Autoridad Marítima emitió una circular donde cambian las escalas de referencia para dotaciones mínimas en naves, donde “se tuvo como lógica focalizar el esfuerzo en el control de la navegación desde la guardia del puente, pero manteniendo para ciertas naves el rol del Capitán como función permanente. Otro cambio es el anexo B “Formulario de solicitud de dotación mínima de seguridad distintas a las establecidas en la escala de referencia”, en términos específicos”. 

La entidad apunta que “este formulario permitirá al armador explicar detalladamente su operación y de qué forma dará cumplimiento a las funciones y tareas del personal embarcado, teniendo en cuenta, además, las características de la nave, y requerir una Dotación Mínima de Seguridad (DMS) distinta a la de los cuadros de referencia.  Es importante recalcar que el uso de este formulario no está limitado. Esto quiere decir, que siempre el armador podrá requerir su DMS por esta vía”. 

Con todo, desde Directemar expresan, acerca de la escasez de personal para dotaciones de naves en Chile, que “no utilizaríamos la palabra preocupante, ya que las actividades marítimas se están desarrollando, a pesar del escenario bajo pandemia. Este último factor gatilló mayores dificultades por las restricciones sanitarias y la poca movilidad de las personas, es decir, dotaciones que, aun estando vigentes, no se encuentran disponibles para embarcarse”. 

“Si incluimos el hecho de que las dotaciones están envejeciendo, hoy necesitamos avanzar de manera más rápida con todos los actores involucrados en la búsqueda de mecanismos e instancias que permitan generar atractivos necesarios para cautivar a las nuevas generaciones. Para ello, es esencial mantener una Marina Mercante y de pesca a la altura de un Estado costero con un extenso litoral y así favorecer el desarrollo de los intereses marítimos de la nación”, aseguran desde la Autoridad Marítima.