Claves para lograr las metas de gestión de residuos dentro de la salmonicultura
Chile: Expertos pertenecientes al ecosistema de gestión de envases y embalajes no domiciliarios explican en detalle la nueva normativa para el cumplimiento exitoso de las metas REP en el sector industrial.
A contar del 16 de septiembre pasado, entraron en vigencia las obligaciones de La Ley de Responsabilidad Extendida del Productor y Fomento al Reciclaje (Ley REP), tanto para los Envases y Embalajes domiciliarios como no domiciliarios. Estos últimos representan un 40% del total de los generados en el país, evidenciando la importancia que tienen las industrias para transitar hacia un modelo de valorización de residuos.
Si bien este sector concentra la mayoría de las actividades de reciclaje del país ―según datos del Ministerio de Medio Ambiente (MMA), valoriza el 49% de sus residuos―, los detalles de la regulación para la etapa de Envases y Embalajes es algo nuevo para muchas empresas.
Para explicar los deberes, desafíos y oportunidades a los que están sujetos productores y consumidores industriales, Ambipar Environment, empresa especializada en gestión de residuos, y ProREP, el único Sistema de Gestión exclusivo de Envases y Embalajes No Domiciliarios del país, entregan algunas claves para aportar al cumplimiento exitoso de las metas progresivas que establece la Ley REP.
Según Leonardo Curotto, gerente Comercial de Ambipar Environment, los envases y embalajes no domiciliarios considerados en la normativa son plásticos, metales, papeles y cartones, que se generan como consecuencia de los procesos de fabricación, transformación, utilización, consumo, limpieza o mantenimiento de la actividad industrial, y que normalmente se acumulan en los patios. Por lo tanto, los alcances de la Ley REP involucran a prácticamente todos los sectores industriales del país.
Por su parte, Pedro Álamos, gerente General de ProREP, recalcó que las metas en la categoría no domiciliaria por tipo de envase para el año 2024 son desafiantes y ambiciosas. “Se exige la valorización de un 13% para productos plásticos, 48% para cartón y 23% para el metal, metas que suben progresivamente para llegar al total de 55%, 85% y 70% al noveno año por producto”.
“Quienes tienen la obligación REP son los productores, que usan envases y embalajes para vender materias primas o insumos a las industrias. “La primera acción que deben tomar es adherirse a un Sistema de Gestión colectivo o bien constituir un Sistema de Gestión individual, de forma de garantizar la valorización de los residuos generados por los productos que ponen en el mercado”, advirtió Leonardo Curotto.
Gestión responsable
De acuerdo con lo explicado por Álamos, los consumidores industriales, que por ley están obligados a gestionar responsablemente sus residuos a través de una empresa reconocida y autorizada por la autoridad sanitaria, ahora deben informar tanto la cantidad de residuos, como la forma en que los están gestionando. “El rol de los consumidores industriales es de vital importancia en el marco de la Ley REP, ya que es mediante la verificación de la valorización realizada por parte de los consumidores industriales que se cumplen las metas de valorización de los productores”.
Otro rol importante es el de las empresas que prestan el servicio de gestión de residuos a los consumidores industriales “y con los cuales nuestro trabajo como Sistema de Gestión es verificar que los documentos y la información que nos haya entregado el consumidor industrial sea verídica, es decir, comprobar que las cantidades de residuos que fueron retirados de una empresa se hayan logrado valorizar efectivamente por la empresa gestora”, expuso el gerente General de ProREP.
Un punto importante a tener en consideración, según el gerente Comercial de Ambipar Environment, es que la Ley REP establece como infracción grave el incumplimiento de estas obligaciones. “Aquellas empresas que no cuenten con un Sistema de Gestión autorizado o no declaren oportunamente ante el Ministerio del Medio Ambiente, se exponen a multas que varían entre las 5.000 y 10.000 UTA”, detalló Leonardo Curotto.
Industria salmonicultora
El ejecutivo de Ambipar Environment, sostuvo que el sector de la salmonicultura lleva años comprometido en buscar soluciones para sus residuos, dado los altos estándares ambientales que exigen los mercados internacionales, a partir de lo cual hay una experiencia aprendida que es muy valiosa, especialmente en residuos plásticos, como el plumavit (poliestireno expandido), los cabos (cuerdas), mallas y boyas.
A modo de ejemplo, señaló que con Ambipar Ecofibras, filial de la compañía con bases operacionales en la zona sur, han desarrollado en conjunto con empresas de la industria salmonicultora una serie de iniciativas para introducir la circularidad en la gestión de residuos, como la recuperación de las pecheras de poliestireno, cuyo material es reutilizado para la fabricación de cañerías de riego o pellets. También han ejecutado proyectos de recolección y pretratamientos de tuberías y botas fabricados con PVC para convertirlos en materia prima de exportación para la confección de diferentes productos derivados del plástico.
Sin embargo, la recién implementada etapa de envases y embalajes de la Ley REP es un nuevo desafío en materia de requisitos normativos y oportunidad para avanzar en materias de circularidad. Según el ejecutivo, las principales dificultades son que algunas empresas no saben cómo gestionar estos materiales que se generan como consecuencia de los procesos productivos, de limpieza o mantenimiento y, por otro lado, que las capacidades instaladas actualmente en la Región de Los Lagos, no alcanzan a atender todo el volumen de residuos que necesita gestionar la industria.
“Por esa razón, uno de los principales focos en la gestión de residuos de Ambipar Ecofibras es la inversión de US$4 millones para concretar GIRI SUR, un moderno Centro de Pretratamiento para la Valorización de Residuos que se ubicará en Puerto Montt y que proyectamos esté listo a fines de 2024”, manifestó el ejecutivo.
La nueva planta apunta a dar solución de reciclaje y trazabilidad a todos los residuos de la familia de envases y embalajes generados en la industria salmonicultora, como films de embalaje, sacos de alimento, bidones de sanitizantes, cajas de medicamentos y, otros materiales, como boyas, flotadores. etc., “además de servicios integrales de gestión inspirados en conceptos de economía circular y carbono neutralidad. Estamos convencidos que la combinación de tecnología y capacidad de GIRI SUR, con el alto estándar que proponemos, acelerará la transición de la industria en el camino hacia un modelo de desarrollo ambiental sostenible en sus operaciones”, dio a conocer Leonardo Curotto.