Banco BCI detalla los desafíos para la industria chilena del salmón

La industria chilena del salmón experimenta uno de sus mejores momentos a nivel financiero –con elevadas utilidades Y EBITDA sanos- el cual, según varios analistas, se sostendría en el largo plazo a causa de los buenos precios de venta que se mantendrían en el sector y las nuevas regulaciones que evitarían un desbarajuste entre oferta y demanda.

Tanto es así, que un estudio elaborado por la Bolsa de Comercio de Santiago da a conocer que, tomando en cuenta el ranking de las 20 acciones chilenas más rentables en el 2018, seis de las empresas que allí figuran son salmonicultoras, un hecho histórico para la industria nacional. Se trata de Salmones Camanchaca, Blumar, Multiexport Foods, Australis Seafoods, AquaChile e Invermar.

Y al igual que los inversionistas, las entidades financieras están recuperando la confianza en el sector salmón local, tras las sucesivas crisis sanitarias que lo golpearon, y aumentando sus colocaciones crediticias para el avance de dicho mercado. En entrevista con Salmonexpert, el gerente Banquero Corporativo de BCI, Bernardo Paul, entrega su visión al respecto.

Considerando que la industria chilena del salmón está en mejor pie en general, ¿han aumentado su exposición crediticia en ella o se mantienen cautos a su avance?

Hemos incrementado nuestras colocaciones en el sector salmón local, enfocándonos en aquellos clientes que presentan una sana situación financiera y donde tenemos una relación cercana con sus accionistas.

¿Cómo ha cambiado su relación con este negocio en el último tiempo, tras la crisis del virus ISA?

Mantenemos nuestra visión con respecto a que esta industria es sustentable en el largo plazo y muy importante para el desarrollo del país, en especial para las regiones entre la Araucanía y Magallanes.

¿Le parece, entonces, que los buenos índices de este sector son sostenibles en el tiempo?

Esperamos que sí, pero para esto es necesario que la regulación actual funcione y que, en ese sentido, tanto la autoridad como las propias empresas hagan su mejor esfuerzo para fiscalizar y cumplirla, respectivamente.

En esa línea, ¿qué opina de los últimos cambios regulatorios, que buscan controlar la producción para resguardar el patrimonio sanitario y ambiental de la salmonicultura nacional?

Nos parecen positivos y muy necesarios para mantener una sana situación sanitaria y poner los incentivos con el fin de que se mantenga alineada la oferta con la demanda de salmón, pero se debe avanzar lo antes posible en el mecanismo de relocalización de concesiones también, de manera que las empresas puedan operar con una mayor flexibilidad que la actual.

¿Es beneficioso el proceso de consolidación que vive el sector chileno, con grandes fusiones y adquisiciones como la operación Agrosuper-AquaChile?

Creemos que es positivo, dado que, si existe un menor número de actores y de tamaño más sólido, debería ser más fácil la coordinación entre éstos y la autoridad y contarían con la capacidad patrimonial para afrontar nuevos eventos sanitarios que se puedan producir.