Los altibajos en las propuestas del Gobierno a los trabajadores de Nova Austral
Chile: Los dirigentes de los sindicatos de la salmonicultora se proponen llegar hasta La Moneda para que el Gobierno contribuya a asegurar su estabilidad laboral, amenazada por los problemas económicos de la empresa y las eventuales sanciones sobre los centros de cultivo.
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Los representantes de los trabajadores de Nova Austral dicen estar decepcionados con las propuestas que han ofrecido las autoridades del Gobierno en Magallanes para generar las condiciones que permitan la continuidad operativa de la empresa y de sus fuentes de empleo.
La primera medida que anunció el Gobierno, a mediados de abril, fue agilizar los permisos para la siembra de salmones en los centros de cultivo Aracena 3 y Cockburn 23. La propuesta salió después de una extensa reunión en la que participaron autoridades, trabajadores y ejecutivos de la salmonicultora.
Pero a los pocos días la propuesta del Gobierno fue otra y descartó incluir a Cockburn 23, reemplazándola por Aracena 5, cambio que implicaba reducir la biomasa que se podría sembrar.
Se esperaba resolver esto en una reunión que tuvieron el martes 25 de abril mediante ley del lobby, la directora del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, Soledad Tapia, el equipo gerencial de Nova Austral y Sernapesca.
Al día siguiente, la delegación Presidencial Regional en Magallanes anunciaba como un logro alcanzado en esa reunión que había quedado habilitado un centro de cultivo requerido por la empresa para la siembra de salmones, y en los plazos que se había solicitado.
“Tal decisión permitiría que la empresa siga funcionando y con ello dar continuidad a los puestos de trabajo para las y los trabajadores”, señalaba ese día un comunicado de la autoridad regional.
Los trabajadores alcanzaron a celebrar la noticia, pero a las pocas horas el escenario cambió por completo cuando fueron informados del detalle de la medida. La propuesta del Gobierno era habilitar únicamente Aracena 3 y, según informaron los dirigentes sindicales, únicamente para un acopio temporal de los peces que están actualmente en la piscicultura en tierra, por el lapso de diez meses.
Según la secretaria del Sindicato de Trabajadores de Nova Austral, Tamara Martínez, eso significaba que no hubo ningún avance.
“Fuimos informados que Aracena 3 solo había sido habilitada como centro de acopio y no como centro de engorda propiamente tal. Finalmente, las gestiones se miden por los resultados y a la fecha ni hemos llegado a ningún acuerdo, los compromisos no se han cumplido y en consecuencia tenemos la necesidad de llegar a nivel central porque aquí no hemos encontrado ninguna respuesta”, indicó la dirigente a la prensa local.
El escenario actual es que no hay materia prima para procesar en la planta de Porvenir y los peces en la piscicultura ubicada en la misma comuna ya superaron el peso recomendable para su traslado al mar, además de la creciente incertidumbre de los trabajadores sobre sus fuentes laborales.
