Salmonicultura, con sello en la transparencia y creación de valor ESG
Chile: "La forma y exigencias para reportes de sustentabilidad han cambiado de manera sustancial, y la industria salmonicultora avanza a la par con estos cambios", afirma Pablo Vidal de Sustenta+.
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*Columna de opinión para Salmonexpert de Pablo Vidal, gerente general de Sustenta+, empresa que ha elaborado más de 70 reportes GRI.
Desde la región de Aysén, localidad a la que le tengo un histórico cariño, veo una industria salmonicultora bien encaminada que está avanzando a la par de las nuevas exigencias globales en materia de ESG.
Y es que la forma y exigencias para reportes de sustentabilidad en el mundo ha cambiado de manera sustancial, y la industria salmonicultora, así como otras en Chile, avanzan a la par con estos cambios.
A fines de junio el Global Reporting Initiative (GRI) publicó un nuevo estándar sectorial de sustentabilidad con indicadores propios para la industria agrícola, acuícola y pesca. A lo anterior se suma que entra en vigor la nueva norma 461 de la CMF que regula el modo de integración de la información ESG con la información financiera.
Por eso, no es casualidad que las cinco grandes empresas del Consejo del Salmón, que representan más del 50% de la producción en el país, entregaran hace unos días en Puerto Aysén, una de las principales comunas salmonicultoras de la macrozona sur de Chile, su segundo Reporte de Impacto Sostenible.
No sólo fue una rendición de cuentas frente a la comunidad, líderes y autoridades, periodistas y quienes quisieran escuchar el cómo se están haciendo las cosas en la región. También fue un hito con el sello de la transparencia.
Si en el año pasado se dieron a conocer alrededor de 50 indicadores sociales, ambientales y económicos, ahora casi se duplicó la cantidad de información entregada, lo que revela el genuino interés de la industria en mostrarse de frente, transparente, con todas las cartas desplegadas sobre la mesa, frente a los distintos stakeholders.
Exhibe lo que es fácil de exhibir, pero también aborda aquellos temas que podrían parecer más complejos. En el reporte te puedes encontrar con temas ambientales, laborales, de empleo y creación de valor económico; así como unos de antibióticos, recuperación de desechos o cuántos recursos económicos se quedan en cada región por patentes. El informe lo aborda todo.
Hay preguntas que encuentran rápidas y serias respuestas como: ¿Qué pasa con los residuos que quedan flotando en las costas? O a propósito de la tan anhelada transición energética y descarbonización: ¿Qué hacen las empresas por el recambio energético?
En el ámbito social: ¿Cuánto aporta la industria a incorporar el salmón a la gastronomía local? O, ¿qué hacen las empresas para acercar esta proteína a las comunidades? También se responden, destacando por ejemplo el alto número de proyectos impulsado en esa línea durante 2021 que casi duplica la información respecto del informe anterior.
Esto no se detiene y, sin duda, la industria del salmón irá por más indicadores e información disponible para el próximo año.
Frente a este vendaval de transformaciones, actualización y nuevas versiones, veo con alegría cómo las empresas particularmente del Consejo del Salmón no sólo han suscrito un compromiso por la transparencia, sino que han ido más lejos al reportar el impacto que generan con esta gestión ESG.
He aquí un valor adicional de este segundo informe de impacto sostenible, y que promete no cambiar en el largo plazo frente a los grandes desafíos que enfrenta la humanidad.
