“Nuestro salmón es seguro para el medio ambiente y para ser consumido”
Chile: Con un trabajo metódico de 25 años, AquaBounty ha logrado diversos hitos en el camino de posicionar su salmón de cultivo genéticamente modificado, con operaciones en distintos países del mundo.
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AquaBounty nació como compañía, basándose en la investigación realizada en Canadá por el Dr. Garth Fletcher. El objetivo principal era hacer frente a la mortalidad creciente que presentaban los salmones juveniles cuando eran trasladados a los centros de cultivo de mar, ya que muchos dejaban de alimentarse y morían.
“El Dr. Fletcher buscó la manera de proteger a los salmones juveniles en sus estadios tempranos, cuando son más vulnerables. Esta investigación lo llevó a insertar un gen de salmón Chinook en salmón Atlántico, creando así un salmón Atlántico con la excepción de ese gen, que continúa alimentándose a pesar de las condiciones. Así, superan esos estados vulnerables y crecen más rápidamente”, comentó Sylvia Wulf, presidenta y CEO de AquaBounty, en conversación exclusiva con Salmonexpert.
Uno de los beneficios de la ingeniería genética que destacó la ejecutiva de la compañía, es que los salmones requieren menor alimentación para generar biomasa. “Producimos más peces, más rápido y con menos recursos”.
Según lo expresado por Sylvia, AquaBounty fue fundada para realizar investigación en esta materia, “pero igualmente para generar una aprobación regulatoria para que pudiera aplicarse la ingeniería genética en animales destinados a consumo humano. Tomamos ese salmón, desarrollado por el Dr. Fletcher y comenzamos el proceso de aprobación regulatoria, tanto en Canadá como Estados Unidos. Esto nos tomó 25 años, ya que se debía probar la seguridad del pescado, la seguridad del entorno y la seguridad para las personas que consumirían nuestro salmón. Requirió muchas generaciones de peces para hacer las pruebas, pero después de 25 años de investigación y desarrollo, podemos decir con absoluta confianza que nuestro pescado es seguro para ser consumido, y es seguro para el ambiente”.
AquaBounty cultiva los salmones en instalaciones RAS en tierra, y los beneficios de aquello es una altísima bioseguridad, por lo que los peces están protegidos, además de que no hay opciones de escapes. “Tenemos seis niveles de contención física en nuestras instalaciones y las ovas de nuestra producción provienen de hembras estériles. Nuestros salmones se comportan exactamente igual que el salmón Atlántico sin el gen de salmón Chinook, se ven iguales, saben igual, se desarrollan igual en los estanques. Además, no están expuestos a patógenos, al piojo de mar, a Bloom de algas o condiciones ambientales desafiantes”, detalló la ejecutiva.
Dentro de los hitos más importantes para la compañía, Sylvia enfatizó en el logro de la aprobación regulatoria en Canadá el 2009, Estados Unidos en 2015 y Brasil el 2020. “Logramos la aprobación regulatoria y luego nos avocamos a trabajar en apoyar la creación un estándar nacional obligatorio en los EE.UU. para dar a conocer los alimentos modificados genéticamente y en cuanto eso fue resuelto, nuestro gran siguiente objetivo fue desarrollar y construir nuestras instalaciones en Indiana y un pequeño centro de cultivo de demostración en Canadá. Teniendo ya las instalaciones y haber comenzado a cultivar nuestros salmones, el siguiente gran hito fue vender estos primeros pescados”.
Otro de los hitos que recalcó la ejecutiva fue la planificación de la construcción de un centro de cultivo a gran escala en Pioneer, Ohio, la cual comenzó en abril del 2022 y tendrá una capacidad de producción de 10 mil toneladas.
Proyecciones
Al ser consultada por las proyecciones de la compañía en los próximos cinco o diez años, la ejecutiva indicó que AquaBounty tendrá dos áreas fortalecidas. “En primer lugar, sabemos operar una instalación RAS en tierra de manera efectiva, para cultivar salmón desde la ova a la cosecha. Producir un salmón hasta la smoltificación es muy diferente a producir un salmón de 5 o 6 kg, porque debes mantenerlo vivo por al menos 20 meses. Y nosotros sabemos hacerlo, porque lo hemos hecho durante 25 años. En segundo lugar, nuestra compañía está verticalmente integrada ya que manejamos la habilidad genética de criar para grupos específicos, no necesariamente para ingeniería genética, sino que cría selectiva. Para ello, tenemos un grupo profesional de ingeniería genética y la investigación dedicada a una eficiente nutrición del pez. Por lo tanto, estas dos áreas corporativas son muy importantes para nuestro éxito, particularmente si pensamos en nuestro crecimiento como compañía, el cual vendrá con la expansión de la producción de salmón en los centros de Norteamérica y otros países".
"Y por otro lado, está el cultivo de otras especies, en especial el camarón, ya que su cultivo se ve afectado por similares desafíos ambientales a los que se enfrenta el salmón. Creemos que el camarón es una especie que se puede adaptar muy bien al cultivo en una instalación RAS y como sabemos cómo operarlo y entendemos la biología de la especie, consideramos que es una gran oportunidad para nuestra compañía”, puntualizó Sylvia Wulf, presidenta y CEO de AquaBounty.
