"El mayor desafío es el deficiente bienestar de los peces"
Noruega: "Desde el punto de vista de biología, los mayores desafíos son la tasa de mortalidad demasiado alta y el deficiente bienestar de los peces", afirmaron en Nofima.
Åsa Maria O. Espmark trabaja como investigadora senior en Nofima y tiene su lugar de trabajo en Sunndalsøra, Noruega, en el grupo de biología de producción.
2023 se ha caracterizado por una gran atención a la mortalidad de los salmones, y la investigadora de Nofima dice en esta entrevista a Kyst.no que el bienestar de los peces siempre ha sido uno de los puntos más importantes para ellos y es una de las áreas centrales en las que Nofima lleva a cabo su investigación aplicada.
Señala que este año los medios especializados se han preocupado, entre otras cosas, por el impuesto sobre el alquiler del terreno y el informe del Comité de Acuicultura en Noruega.
“Pero desde el punto de vista de biología, los mayores desafíos son la tasa de mortalidad demasiado alta y el deficiente bienestar de los peces. La mortalidad ha sido el mayor desafío durante muchos años, y esto es muy malo para los peces, pero también para la reputación de la industria acuícola”, indica la experta.
El aspecto del consumidor, a su juicio, también ha sido un tema de actualidad durante el 2023. “Es lamentable porque el salmón es un alimento saludable que la gente debería comer más, y luego tienen que confiar en que el pescado que compran ha tenido una buena vida”.
Lamentablemente, Espmark cree que la mortalidad también se aplicará en 2024. “Observamos que tanto la industria como el aparato político están preocupados por el tema y que la industria quiere que Nofima participe en proyectos que, con suerte, resolverán los desafíos de la salud y el bienestar de los peces”.
“Sin embargo, soy optimista para el futuro, ya que en Noruega hay muchos buenos productores de salmón que conocen excelentes soluciones a los desafíos y ya están haciendo mucho para limitar el bienestar y la mortalidad”.
Como ejemplo, quiere presentar nuevos sistemas de producción que limiten el riesgo de piojos y de escapes de salmónidos y, por tanto, la necesidad de eliminar los parásitos, lo que causa muchos problemas de bienestar.
“Con suerte, 2024 será el año en el que se crearán las condiciones para que los productores y operadores de sistemas cerrados en el mar obtengan oportunidades rentables”.