Gerente general de Multi X advierte cómo el salmón chileno pierde terreno ante el noruego

Cristian Swett.

“Noruega ha desarrollado una industria robusta y eficiente, con lineamiento claro hacia el futuro. En contraste, Chile aún debe superar desafíos regulatorios”, dijo Cristian Swett.

El gerente general de Multi X, Cristian Swett, dio a conocer cómo la industria chilena del salmón está perdiendo terreno frente a la noruega.

Mediante una publicación en su LinkedIn, manifestó que “Chile, con vastos recursos marinos, enfrenta el estancamiento en su salmonicultura, que solo ocupa el 0,04% del mar interior, mientras Noruega crece gracias a una estrategia nacional clara”.

“Desde el sur de Puerto Montt hasta la Isla Navarino, Chile cuenta con un mar interior único, con 11 millones de hectáreas de aguas frías protegidas por islas y canales, lo que ha permitido que la salmonicultura surja como un pilar económico. Este sector, conocido como el “cobre del sur”, es crucial para la economía de las regiones australes, emplea a más de 80.000 personas y representa la segunda mayor exportación de Chile, con una facturación anual de 6.500 millones de dólares”.

En Chile, agregó, “la salmonicultura se desarrolla en sólo 4.000 hectáreas, menos del 0,1% de los 11 millones disponibles, una extensión superior a los 9 millones de Noruega. Sin embargo, a diferencia de Noruega, la salmonicultura chilena está estancada. Hace un par de décadas, ambos países producían volúmenes similares de salmón, pero hoy Noruega produce un 56% más y es el mayor productor del mundo”.

Este crecimiento, de acuerdo con Swett, “ha sido posible gracias al enfoque estratégico de Noruega, que incluye una estrategia nacional clara y una colaboración efectiva entre todos los actores. En 2020, el gobierno noruego lanzó "A Sea of Opportunities", un plan que promueve el crecimiento de la salmonicultura en aspectos comunitarios, regulatorios y comerciales”.

“Noruega ha desarrollado una industria robusta y eficiente, con un lineamiento claro hacia el futuro. En contraste, Chile aún debe superar desafíos regulatorios, mejorar la coordinación entre el sector público y privado, y, lo más importante, establecer una visión común”.

“Adoptar una estrategia nacional que aproveche sus recursos naturales y promueva un crecimiento sostenible es crucial para que la salmonicultura chilena, que ofrece una de las proteínas más amigables con el cambio climático, además de ser altamente nutritiva, pueda consolidarse y seguir creciendo como un motor económico clave del sur de Chile”, señaló al respecto Cristian Swett.