Opinión Editorial
Autodenuncias: señal de que la salmonicultura se vuelca al cumplimiento normativo
Chile: El que existan autodenuncias, resulta una buena señal, ya que muestra una positiva voluntad de las empresas salmonicultoras de admitir infracción ambiental y el deseo de regularizar la situación.
Durante los últimos meses, se han conocido al menos dos empresas que tomaron el camino de la autodenuncia. Este instrumento, es un incentivo positivo cada vez más utilizado por la salmonicultura y que según el artículo 41 de la Ley Orgánica de la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA), su presentación permite al infractor optar al beneficio de una exención o rebaja de la multa que correspondería aplicar.
Una de estas empresas es Yadran, que comunicó a la SMA la sobreproducción ocurrida en cuatro centros de cultivo de salmones, todos ubicados en la región de Aysén.
Por otra parte, Australis Seafoods, presentó una autodenuncia por sobreproducción de salmón en 49 ciclos productivos, asociado a 33 centros de cultivo, frente a lo cual se comenzaron cinco procedimientos sancionatorios.
Los nuevos dueños de la compañía productora, Joyvio, han dejado claro que estas malas prácticas serían de la anterior administración, que lideraba Isidoro Quiroga, es por lo mismo que se activaron procesos judiciales por esta situación.
Todo lo anterior, como práctica productiva, es ciertamente negativo y la misma industria del salmón reconoce que debe volver a un Plan de Cumplimiento, indicando que es un desafío en el que está trabajando bajar al mínimo o terminar con estos casos.
Sin embargo, el que existan autodenuncias, resulta una buena señal, ya que muestra una positiva voluntad de las empresas de admitir infracción ambiental y el deseo de regularizar la situación, de la mano de las autoridades correspondientes.
Es importante tener presente que, con la autodenuncia, se abre un proceso de investigación para verificar lo autodenunciado, y luego, comprobado lo anterior, se procede igualmente a formular cargos según lo dispone la ley, y la salmonicultora debe presentar un Programa de Cumplimiento con el fin de reducir o eliminar cualquier acto productivo apartado de la norma.