Impacto del lavado de redes: riesgos para la salud de peces
El lavado de redes en centros de cultivo, una práctica esencial para manejar el biofouling, plantea riesgos significativos para la salud de los peces, los ecosistemas cercanos y la bioseguridad.
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Un estudio realizado por científicos de Sintef Ocean (Noruega) y LWP (Nueva Zelanda) evaluaron el impacto del biofouling que se libera durante el lavado de redes en los centros de cultivo ubicados en agua mar.
La investigación se enfocó en el hydroid Ectopleura larynx, un organismo comúnmente encontrado en el biofouling de las redes peceras. Los académicos evaluaron el impacto que genera en la salud de los peces, en los centros cercanos y en el ecosistema adyacente a la producción.
El biofouling es un serio desafío para la acuicultura mundial (Bannister y col, 2019). La colonización de las redes peceras por organismos sésiles obstruye la abertura de la red, lo cual reduce la disponibilidad de oxígeno y la eliminación de desechos, también produce un aumento en la resistencia y cargas de tensión en los sistemas de anclaje.
Para la mitigación de este efecto, se realiza la limpieza periódica en las redes, este lavado de redes se realiza con lavadoras especializadas que van eliminando la bioincrustación, mediante la aplicación de agua a altas presiones.
Los científicos utilizaron un programa de modelación 3D de hidrodinámica parametrizado con propiedades físicas y biológicas de partículas de desecho de limpieza, para evaluar la dispersión del biofouling a causa del lavado de redes de dos centros de cultivo noruegos. Los hidroides fueron seleccionados debido a los riesgos que tienen los nematocistos en la salud branquial de los peces y su alta abundancia percibida en redes peceras de varias regiones del mundo.
Los resultados evidenciaron que se detectaron las partículas hidroides liberadas durante el proceso de limpieza de redes, inclusive hasta 41 veces más sobre el intervalo de referencia en la jaula contigua a la limpieza. Por otro lado, mencionan los académicos, las partículas fueron transportadas hasta 5.5 km desde el lugar de limpieza en 48 horas.
Así también, los nematocistos de los hidroides (células urticantes) permanecieron activos durante 48 hrs lo cual representa un riesgo para el órgano branquial al estar expuesto a concentraciones altas de partículas durante períodos prolongados de limpieza.
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Los fragmentos de los hidroides que se liberan a causa del lavado de redes fueron asociados a contribuir en la dispersión de enfermedades, debido a que hay asociación con Neoparamoeba perurans, Tenacibaculum maritimum, Ichthyobodo spp, Ca. Branchiomonas cytosticola y Ca. Syngnamydia salmonis. Por otro lado, comentan los científicos que las partículas del biofouling pueden potencialmente afectar a peces silvestres y población invertebrada.
En conclusión, la dispersión de partículas que se liberan a causa del lavado de redes peceras en centros de cultivo agua mar, plantea importantes desafíos sanitarios, de bioseguridad y ambientales. Por estas razones evidencia el estudio, son requeridas nuevas tecnologías innovadoras y regulaciones para poder abordar este tipo de temáticas de manera más sostenible.
Lea el abstract del estudio “Catch my drift? Between-farm dispersal of biofouling waste from salmon pen net cleaning: Potential risks for fish health” aquí.
