Trabajadores critican duramente actuar de ONGs en contra de la industria del salmón

Alejandro Santibáñez.

Como “campaña del terror” calificaron desde la Multisindical de Trabajadores Salmoneros esta nueva iniciativa de ONGs. “No quieren dialogar, están cegados y no tranzan”, argumentan.

“Por la salida de las salmoneras de Áreas Protegidas, sin relocalización”, es la consigna de la recientemente conformada Alianza por la Defensa de las Áreas Protegidas, entidad que agrupa a 37 organizaciones de distintas regiones del país, principalmente de Aysén y Magallanes. El propósito de esta campaña es específico y busca la salida de las concesiones acuícolas de parques y reservas nacionales del sur austral de Chile.

El lanzamiento de esta iniciativa se hizo recientemente y está conformada, entre otras, por Fundación Terram, Fundación ReWilding Chile, Modatima, Centro Ballena Azul, Chile Sustentable, en el marco del revuelo que causó el informe de Contraloría que constató severas fallas en la institucionalidad frente a concesiones que debían caducarse, pero que siguieron vigentes.

En conversación con Salmonexpert, Alejandro Santibáñez, presidente de la Multisindical de Trabajadores Salmoneros, Pesquerías y Ramas Afines, señaló que, al parecer, las ONG’s no entendieron a cabalidad el informe de la Contraloría y la interpretaron a conveniencia.

“Esta nueva Alianza expresa que el Estado ha cometido una aberración en contra del medioambiente. Sin duda, está muy exacerbado el escenario. Es una campaña del terror de parte, no solo de esta nueva organización, sino que, por ejemplo, la publicación del The New York Times hace unas semanas, que hizo alusión a la industria, con frases hasta ‘poéticas’. La pregunta del millón porque ese medio de comunicación, siendo tan reconocido y riguroso, no consultó todas las miradas. Como Multisindical, respondimos a este diario, pero entendemos esto como una campaña netamente económica, que no tiene que ver con el producto en si o la buena intención de las ONGs de proteger el medio ambiente. Esto, porque quieren potenciar su producto interno, el salmón de Alaska”, manifestó Santibáñez.

El líder sindical enfatizó en que aún se desconoce quiénes financian estos movimientos y pareciera ser que se van repitiendo las mismas organizaciones a nivel nacional, que van mutando en nombres, pero con las mismas personas gestionando estas campañas.

“Todos tienen derecho a replicar, a consultar o expresar nuestros puntos de vista cuando consideramos que algo no se acoge a la normativa. Pero esta campaña no tiene nada que ver con el conservacionismo, sino más bien con un resguardo económico que no tiene paragón. Ni siquiera con la minería han sido tan insistentes como con la salmonicultura. Todo esto, ha llevado a los trabajadores a estar alerta, desde la Multisindical que hoy agrupa a más de 35 mil socios y otras organizaciones sindicales también. Este crecimiento exponencial es porque los trabajadores han ido entendiendo que toda esta campaña del terror que han generado estas organizaciones los afecta directamente”, precisó Santibáñez.

A su juicio, lo anterior no se relaciona con una protección a las empresas, sino que tiene que ver con un modelo productivo que ha ido mejorando, evolucionando en el tiempo y que actualmente ejerce medidas efectivas en el aspecto medioambiental, obviamente con ciertas brechas a superar.

“Esto tiene mucho que ver mucho con el trabajador de la industria y que vive en esta zona. Las ONGs son manejadas desde afuera y sus colaboradores son de otros territorios, y no conocen la realidad de acá. No saben lo duro que es llevar el pan al hogar y lo que cuesta trabajar en el sur de Chile, donde las distancias son enormes, donde hay localidades a las cuales el Estado muchas veces no llega. Eso es lo que más nos incomoda como trabajadores, por lo que seguiremos haciendo frente, junto a la industria, a lo que nosotros consideramos que es maltrato injusto. Pera también tenemos muy claro que, nuestra obligación como trabajadores, es velar porque el medioambiente siga siendo resguardado y que la industria cause el menor impacto posible y que las empresas funciones de manera correcta. En eso no transamos”, puntualizó Alejandro.

Conversatorios

Según lo planteado por Santibáñez, en los cinco conversatorios que organizó la organización sindical, fue recurrente el sentir de todos los territorios de lo preocupante que es que ONGs que no transparentan recursos, prometan un buen mensaje, como es cuidar el medio ambiente a ultranza.

“Para ellos ojalá no exista ningún sector productivo en el sur de Chile, salvo el turismo para que ellos vengan a pasear y a deleitarse con nuestros paisajes. Y esto no es el sentir solo de trabajadores de la industria, sino de comunidades, JJVV, representantes de otros sectores productivos como el transporte, la pesca artesanal, cámaras de comercio y asociaciones de emprendedores. Lo que proponen las ONGs no tiene que ver con el cuidado del medio ambiente, sino derechamente eliminar la industria del salmón. Lo lamentable es ver que estas organizaciones han manipulado a ciertos sectores, como comunidades de Pueblos Originarios solicitantes de las ECMPO para que estén en contra de la salmonicultura. Es preocupante la mal utilización de, en este caso, la Ley Lafkenche, en favor de intereses mezquinos, que no tienen que ver con el desarrollo y bienestar de las personas, sino que quizás qué intención oscura”, indicó el presidente de la Multisindical.

A lo anterior, Santibáñez agregó que en todas estas instancias de conversación la organización se manifestó llana a conversar con todas las partes y los interesados, incluyendo a las ONGs, “pero entendemos que ellos no tienen interés de participar de diálogos. Tienen una ceguera total en este sentido y no tranzan. Pero si quisieran dialogar, estamos totalmente disponibles. Actualmente los trabajadores tienen una mirada muy culta, educada y formada de lo que queremos y cómo queremos que se hagan las cosas en nuestros territorios, por lo que no queremos que ellos nos vengan a enseñar, sino que queremos que vengan a aportar de buena forma. Como trabajadores, nos declaramos en alerta en todo momento, para defender lo que es justo, el del desarrollo económico, cultural y social del sur de Chile”.